Capítulo 16

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Axel

Abro los ojos perezosamente y sopeso la idea de estrellar el puto teléfono contra el suelo para que deje de sonar. Hace apenas dos horas que conseguí dormirme, son las seis de la mañana y estoy totalmente agotado. Labowsky me ordenó darle todos los detalles de lo ocurrido en uno de los pasadizos que conectan la casa de los Lennox y el orfanato de Vial. Aprobó mi idea de adentrar de manera discreta al pequeño Kai en la misión, ya que no debería suponer un peligro para él.

Finalmente, acepto la llamada entrante y reprimo mis ganas de gritarle a la persona que se encuentra al otro lado de la línea.

⸺ Schroder, Frost despertó, encárgate de ponerle al tanto de todo. ⸺ oigo la voz de mi jefe. Me tomo mi tiempo para procesarlo, joder... Jane por fin.

⸺ ¿Qué significa todo? ⸺ pregunto tras mi pequeño trance.

⸺ Primero tenemos que asegurarnos de que no sabía nada sobre su estancia en Ghaba o su conocimiento por ese local.

⸺ Espere... ¿Cree que Jane nos ha traicionado? ⸺ ni siquiera intento disimular mi cólera. Sin cortar la llamado con el maldito que tengo como jefe, me visto rápidamente.

⸺ No descarto nada, si tan seguro estás de que no es una traidora no te resultará molesto preguntarle, quiero que me informes de todo. Jeremy estará allí también.

⸺ Quiero hablar con ella a solas, la noticia es impactante, no creo que reaccione bien.

⸺ Jeremy estará en todo momento, Schroder, soy tu superior, obedece.

Cuelga la llamada, acto que se está convirtiendo en costumbre. Salgo de mi casa dando un portazo y subo a mi coche a toda prisa.

Jane

Unos brazos rodean mi cuerpo, abro los ojos, pero todo está oscuro, el olor a alcohol y otras sustancias llegan a mis fosas nasales haciéndome arrugar la nariz. Me llevo la mano a mi brazo izquierdo notando un malestar y palpo la parte afectada advirtiendo un par de agujeritos seguidos de otros dos unos centímetros más abajo.

Alarmada me remuevo intentando zafarme de los brazos que me retienen. Pataleo e intento hablar, pero mi lengua pesa y solo emito sonidos incoherentes. De repente quitan una venda de mis ojos dejándome ver la habitación.

Las paredes son amarillentas y caen goteras del techo. A mi lado hay dos hombres más el que me retiene y el que está de pie. Miro mi cuerpo desnudo lleno de arañazos y comienzo a llorar confundida sin saber que ha pasado.

De pronto alguien entra a la habitación y reconozco a la persona.

⸺ ¿Qué hace despierta? ¿No le habéis pinchado suficiente dosis? ⸺ dice mi novio alarmado

Grito su nombre mientras lloro, pero él me ignora por completo, sin importar lo mal que me encuentre. Un hombre me inyecta algo de nuevo y caigo rendida en un sueño escuchando las risas escalofriantes de fondo.

Despierto de nuevo, han pasado horas, días, semanas... no lo sé. Salgo de la cama sin hacer ruido, estoy completamente sola. A pasos lentos, me muevo, me duele todo el cuerpo. Llego hasta la puerta, pero antes de que toque el pomo esta se abre dejándome ver a Mark.

No sé si alegrarme o no, la respuesta es no. Cierra la puerta tras él y me arrincona sobre la misma. Clavo mis uñas en la puerta hundiéndolas en la madera, sus manos ahorcan mi cuello con fuerza mientras en su cara se tiñe una sonrisa malévola.

⸺ ¿Por qué? ⸺ logro preguntar sintiendo que no hay ni una gota de oxígeno en mi cuerpo.

⸺ Por que vales mucho dinero, Jane, antes lo hacías al menos. Ahora ya nadie quiere tu cuerpo lleno de golpes y marcas, das asco.

Rojo Puro Infierno Donde viven las historias. Descúbrelo ahora