Harry se mordió los labios al notar que tan solo faltaba una hora para que su tiempo junto a Severus acabará, si por él fuera, aquella hora hubiera durado todo el día pero, sabía que habían cosas que simplemente no podía eludir, entre ellas, sus padres.—¿Quieres que te ayude a limpiar tu herida?
Severus se hallaba sentado junto a Harry, en el sofá que se encontraba en el living de la casa, abrazando al joven con su brazo izquierdo.—Ya te dije que estoy bien.
Harry suspiró, se acurrucó en el pecho del mayor, queriendo que el tiempo no se acabará. Odiaba sus vacaciones por el único hecho que, le hacía estar apartado de Severus.—¿Fue una herida bastante grande? Escuché a mi padrino hablar sobre eso.
—Lo fue, por casi me quedo sin brazo pero, hallare la forma de cobrármela.—la decisión era genuina.—Tuve algo de ayuda, la Verdad.
—¿Quién te ayudó?—pregunto, sintiéndose algo molesto por el hecho de no ser él, quien hubiera ayudado al más mayor.
Severus rio, y beso el cuello de Harry, haciendo enrojecer al chico—Un amigo, pero, tu siempre serás mi favorito, Harry.
Harry sonrió, busco los labios de Severus y no tardaron, en besarse nuevamente, sabían que tenían que aprovechar cada uno de los minutos que tenían en aquella última hora porque, sería muy difícil obtener un nuevo permiso como ese. Harry, no quería seguir utilizando a Hermione como excusa, y tampoco quería tener problemas con sus padres pero.. se volvía loco estando en casa sin saber de Severus, sin poder ayudarlo.
El sonido de la chimenea los sobresalto, Harry la observó con algo de miedo pero, Severus le tranquilizó, la redflu estaba desactivada para visitas pero, aún así, una nota fue capaz de escullirse por esta y volar directamente hacia Severus.
“Necesito que te reúnas conmigo ahora mismo, estoy en la cabaña. Es importante
James Potter”
Severus rodó los ojos, y destruyo la nota, evitando que Harry pudiera curiosear el contenido. Le haría pagar a Potter el tiempo que estaba perdiendo en ese instante.—Surgió algo, Harry, tengo que salir.
Harry bufó.—¿Quién era? ¿Tienes que reunirte con el señor tenebroso?
Severus soltó una risita y negó, beso nuevamente aquellos labios.—No, no es esa clase de reunión pero, si es importante.—Murmuro.—En la noche te escribiré por el pergamino ¿Vale?
Harry asintió, aquella presurosa despedida no le agrado, abrazo con fuerza a Severus.—Te quiero.
—No tanto como yo, esposa.
∆•∆•∆•∆•∆•∆•∆•∆
James sintió su estómago retorcerse mientras esperaba que Severus hiciera acto de presencia, estaba sentado en uno de los dos sillones que se hallaba en el lugar. Se colocó de pie de un salto al percibir que, Severus ya se encontraba ahí.
—¡Estaba en algo importante, Potter! Espero que tengas un na justificación por tu estúpida nota.—Severus entro al lugar con fuertes pisadas, como si estuviera matando cucarachas.
James le observó y, el pálido notó el sudor en su frente.
—¿Qué diablos te pasa, Potter? ¿Te sientes mal?—Pregunto, se acercó unos pasos hacia James hasta que algo lo detuvo.
—Hola, Severus.
Snape, dio una especie de brinco, girándose con brusquedad. Cerca de la chimenea y sentado en un sillón, se hallaba Albus Dumbledore. El pálido se tenso, observó rápidamente a James Potter que, fue incapaz de mirarle a los ojos.
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El mortifago & yo
FanfictionFinalizando su sexto año en Hogwarts, Harry emprende una aventura en solitario a la casa de los gritos. Queriendo observar el lugar en donde uno de los mejores amigos de su padre había pasado sus transformaciones a hombre lobo. Pero en medio de su...