*Heavy*
-Hola!!-salude a los compañeros.
-Que bueno que llegaste Heavy, te estábamos esperando. Hoy hay mucha gente-dijo el gerente entrenándome el mandil.
-Sera pan comido, viejo-conteste acomodándome la gorra.
-Wow!!. eres tan agradable-exclamo la clienta 356.
-Oh, jajaja-me limite a pasar la mano por mi nuca.
-Entonces... ¿Cuándo me darás tu numero?-pregunto la clienta 378, paseando el dedo por el mostrador.
-Hoy no señorita. Siguiente por favor-conteste restando importancia.
-Deberías darle tu numero a esa pobre chica, lleva mas de un mes viniendo solo para verte a ti-comento un compañero.
-Para la próxima le doy el tuyo-conteste burlón-buenas tardes, bienvenido a Mac ¿Puedo tomar su orden?
-Buenas tarde, deme dos...-reconocí inmediatamente la voz de Aliona-...hamburguesas con doble carne, doble queso, una caja grande de papas y una soda de litro.
-Hola!! Que sorpresa verte por aquí!-salude entusiasmado-enseguida te dan tu orden. ¿Qué haces por aquí?-pregunte recargándome en el mostrador.
Ella miro a ambos lados nerviosa, su cabello castaño estaba ligeramente desordenado.
-No es obvio-contesto.
-Jajaja, no pensé que fueras de las que comen hamburguesas, te vez demasiado delgada-conteste mirándola de abajo hacia arriba. Sus ojos eran como el cristal, se miraban duros y fríos pero a la vez delicados y puros.
-Aquí esta la orden-entrego mi compañera.
-Ah claro-conteste saliendo del ensueño.
-Toma-dijo Aliona tendiéndome la tarjeta.
-Nop-conteste haciendo una X con los brazos-Yo invito-dije guiñándole un ojo.
Un murmullo recorrió la tienda.
-Primero con Dee y ahora con el hermano menor, que descarada-dijo una clienta con uniforme de estudiante.
-Esa chica no guarda su cola en ningún lado, es una cualquiera-murmuro otra.
Aliona giro ligeramente la cabeza, puso una sonrisa irónica mientras chasqueaba la lengua. Tomo su orden y camino hacia la chicas-si fuera una cualquiera, ¿no tendríamos la misma suerte?-después salió de la tienda con una sonrisa triunfante.
Las jóvenes gruñeron y luego hicieron un puchero.
-Ella es muy mala-dijo una haciendo ojos de perro.
Es una diosa esa chica-pensé cautivado por sus temperamento.
*Aliona*
Par de mocosas, mira que hablar de mi despreocupadamente en mi cara, ja!-refunfuñaba-son estudiantes de preparatoria así que no debo ser muy agresiva, seguro ni siquiera son mayores de edad todavía. AY !! como duele ser adulto y no poder partirles la cara porque son menores-gruñí mientras esperaba el trasporte.
Subí al trasporte, pague y me senté junto a una ventana. Me coloque los audífonos y espere hasta llegar a mi destino.
Baje frente al cementerio o mejor dicho el ''Nicho'', lugar donde se guardan las urnas de los muertos. Entre sin problema, subí las escaleras y entre al cuarto donde estaban mi abuelo.
-Hola abuelo, soy yo. Primero que nada, no te traje nada porque se que te hubieras molestado si gasto en flores u otra cosa, ya que lo considerarías un desperdicio de dinero, además de que no te gusta ninguna flor, así que mejor prendo tu vela-encendí la vela artificial-listo. Sabes, la abuela cada vez esta mas senil y desquiciada. Hablo desde mi amargura viejo, no te ofendas...
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Mátame, sáname: que tontería
FanfictionVida nueva, escuela nueva, gente nueva, una vida llena de felicidad... Que tontería Enamorarme del rockero del salón nunca fue mi intención. Que fastidio son los sentimientos. Dee es el chico mas sobresaliente de toda la universidad. Cómo si mis pro...