Me puse la música de arriba para escribir, por si quieren sentir lo mismo que yo ahí se la dejo.
Os amo
____________________________________________POV T/N
-Me alegra ver que me has hecho caso- sonreí satisfecha al ver que Suguru se había colocado una máscara.
-Desde que sucedió lo de Satoru, esto ha dejado de ser un juego. Lo habría hecho aunque no me lo pidieras,pero como siempre, no se te escapa nada - soltó una risita.
Flashbak/unas horas antes
Mientras esperaba a que Satoru llegara a casa, me encargué de llamar a Suguru por uno de los teléfonos policiales que son imposible de alcanzar por línea, así, nuestra conversación sería segura.
-¿Si? ¿Quién es? - respondió confuso.
-No hay tiempo para eso, ya deberías saber quién soy - hice una pausa - Te necesito en las coordenadas (?????) dentro de dos horas ¿Podrías hacerlo? -
-No esperaba que tuvieras tanta energía después de lo sucedido pero... Estaré allí sin falta - podía imaginarmelo perfectamente sonriendo.
-Gracias - me acordé de lo más importante - También necesito que vengas con la cara tapada y un casco nuevo, no quiero que nos reconozcan bajo ningún concepto-
-Eso está hecho - rió.
-Nos vemos - me despedí
-Por fin algo de movimiento, hasta ahora - concluyó y colgó.
Fin de la llamada
-Perfecto, ahora sólo falta... - mi cuerpo dio un brinco al escuchar el timbre de casa.
Levanté mi puño en alto como signo de victoria - Hablando del rey de Roma-
Fui a paso ligero hasta la puerta y abrí. No me sorprendió ver a Satoru en casa antes de lo esperado.
-¿Buenas noches? - saludó dejando muy clara su confusión con todo esto.
-Sisisi, buenas noches - lo metí en casa de un tirón y le quité de las manos las maletas a los guardaespaldas de Satoru.
-Muchas gracias por vuestro trabajo - les cerré la puerta en la cara.
-¿Se puede saber que pasa? - preguntó Satoru desde el suelo, lo había tirado sin querer.
-No hay tiempo para eso - arrastré todas las maletas hasta su cuarto y después lo arrastré a él.
Gojo se quedó sin palabras al ver la habitación que había preparado para él - Esta habitación es más bonita que toda mi mansión entera- dijo en un susurro mientras miraba la habitación de arriba abajo
Me encogí de hombros - Normal -
-Ey- gritó ofendido, no le gustaba que criticaran sus gustos.
-Empareja tus maletas ponte algo más cómodo - miré mal su traje - y te contaré el por qué de todo esto, aunque me sorprende que no lo sepas ya -
-De acuerdo, de acuerdo... Nos hemos levantado hoy con el pie izquierdo eh -eso último lo dijo en un susurro que obviamente escuché, pero decidí ignorarlo.
Cerré la puerta con llave de casa, con una diferencia.
Había cambiado mi cerradura, así Sukuna e Itadori no tendrían acceso a mi casa. Me dolía sospechar de ellos, pero la seguridad era lo primero. Además, no sólo sospechaba de ellos, sino de todos.También había llamado a un especialista en informática, para que comprobara que no habían cámaras ocultas en casa.
Mis ventanas ahora eran negras si las veías desde fuera, pero si podías ver a través de ellas.