Agosto// Hermione Granger (Traducción)

Capítulo cuarenta y dos

CW: Menciones de homofobia, breves discusiones sobre el consentimiento ¿también spoilers del rey león? Lol

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Día dos

Pop

Robyn aterrizó con Winnie a su lado frente a The Pink Griffin por segunda vez. Sin embargo, no vio a Hermione.

—¡Boo!

No importa.

—Grosera — dijo a la ligera mientras la chica se movía frente a ella. —No es que me hayas asustado, sin embargo.

—Si te asuste — insistió Hermione con una sonrisa.

—No.

—Tu corazón definitivamente está latiendo más rápido.

Tal vez lo estaba.

Antes de que pudiera replicar, Winnie habló: —¡La señorita Robby regresará a la misma hora, a las cuatro y media, lo hará! Señorita Hermione, ¿Cuidará de la señorita Robby?

¿Qué pasaba con la gente diciéndole a Hermione que la cuidara? ¿No creían que podía cuidar de sí misma?

En realidad, borra eso. No podía, al menos no en el mundo muggle, que estaba lleno de cosas aterradoras como los autos.

—¡Por supuesto que lo hare! — Hermione dijo alegremente con una mirada a Robyn. —¡Espero que hayas estado disfrutando de tu tiempo libre!

Winnie asintió con entusiasmo y aplaudió, —¡Sí! ¡La señorita Robby pasa tiempo con Winnie en el bosque! ¡La señorita Robby es la mejor amiga de Winnie! — Ella exclamo. Al final tenía lágrimas en sus grandes ojos y se aferró con fuerza a la pierna de Robyn.

—Tú también eres mi mejor amiga, Winnie — dijo Robyn con una cariñosa palmada en la cabeza. También era cierto. Aparte de Astoria y las Ravenclaws. Winnie la había cuidado desde que era una bebé; no podía imaginar la vida sin ella.

Hermione los miraba con una suave sonrisa. —que linda — comentó cuando Robyn la miró a los ojos.

Robyn negó con la cabeza y le pidió a Winnie que regresara a casa. —Hermione y yo tenemos una película que ver, ¿no?

—Así es, de hecho.

—¡Winnie la dejará ir, entonces! ¡Adiós!

—Adiós, Winnie — dijeron a coro.

La elfina desapareció ni un momento después.

Pasearon por el mercado Malarkey y luego por el callejón sáfica. Robyn preguntó si algún día podrían visitar el Museo de Curiosidades Muggles, a lo que Hermione accedió, aunque señaló que podía decirle o incluso enseñarle a Robyn todo lo que quisiera.

—Yo te quiero enseñar — dijo con una risita.

—Está bien, gracias — respondió Robyn ignorantemente.

Pero Hermione continuó: — este mundo esplendido.

Fue un poco extraño decirlo, pero Robyn no iba a cuestionarla. —Estoy segura de que lo es, un poco — estuvo de acuerdo.

—Ven princesa, y deja a tu corazón soñar.

OK no importa. Robyn iba a interrogarla.

—¿"Princesa"? ¿Mi corazón? ¿Qué?