61

1.7K 176 7
                                    

Los dias pasaban y Elena seguía encontrando aún más relatos que hundiría a Mosley, noches de pesadillas silenciosas torturandose conjunto con escalofríos que le ponian los pelos de punta, sus sueños cambiaban pero siempre era el mismo desenlace. Trágico y doloroso pero una pieza nunca terminaba de encajar..

Hizo aun lado esos pensamiento y se sentó allí con las piernas cruzadas observando el expediente uniendo una página más con su elegante caligrafía, estaba demasiado concentrada en ello para notar que Arthur estaba allí viendola, no era bueno con las palabras siempre quería decirle a esa mujer lo mucho que había cambia su vida, se acercó con suma cautela posando sus manos sobre los hombros de Elena. Ella sonrió y tomó su mano

— Pense que jamás te acercarías, parecías una estatua griega parado allí — hablo Elena riendo — Tan quieto y recto que hasta pensé que no estabas respirando

Arthur se unió a la risa abrazandola y disfrutando de su perfume

— Lo siento, no quería interrumpirte cuando te veías tan concentrada — dijo cohibido con sus mejillas ligeramente rojizas

— Nunca sería una interrupción cuando se trata de ti — respondió dándose la vuelta — Mi gran querido Arthur, ¿que pasa por tu mente?

Ella siempre sabía que algo ocurría en Arthur y eso le encantaba

— Estoy preocupado — confeso mirandola

— ¿Que es lo que te preocupa? — preguntó

— Tú — solto

Lo había visto, Elena estaba perturbada y incluso cambiada. Arthur siempre veía como ella se preocupaba por todos, se riesgaba por su familia pero acaso alguien se preocupaba por ella, Tommy por supuesto aunque esté parecía no notar que su esposa tenía los ojos cansados.
Que bebía más café de lo normal, que clavaba una uña en la punta de su dedo anular o en la palma de la mano, causando que se le endurezca la piel y quedará con el tic nervioso.

— ¿Yo? — dijo interrogante con una ceja alzada

— Si — asintio tirando de su mano ocasionando que se levantará de su asiento — Cuéntame Ángel, háblame de lo que sea que te esté perturbando pero ya no te hagas esto

— ¿Hacerme que? Arthur, estoy bien — fingió una sonrisa apoyando su mano en la mejilla del hombre

— ¿Bien? Mira tus manos — negó tomando con cuidado la mano de Elena — Tus ojos Ángel ¿cuando fue la última vez que tuviste una pesadilla? ¿Cuántas horas haz dormido?

— Una hora — respondió penosa — Tuve una pesadilla a las cuatro de la mañana

— ¡DORMISTE SOLO UNA HORA! — exclamo sorprendido — Elena

— Arthur, tranquilo — dijo colocando sus manos en los hombros de Arthur

Este la miro con los ojos brillosos preocupado por su bienestar, Elena solo hizo una mueca

— Nena, si todo esto de hundir a Oswald Mosley te tiene así — hablo con frustración — Yo.. se que es importante para ti, limpiaste el nombre de Lizzie y planeas darle tranquilidad a más mujeres..

— Pero..

— Te esta quitando tu energía, todas esas confecciones que escuchaste te tienen con pesadillas. Temo perderte — confeso asustado

Elena apoyo su cabeza en el pecho de Arthur y lo rodeó con sus brazos, este la apreto fuerte contra él.
Amistad si pero tambien es amor, no la clase de amor que vemos en las parejas sino uno distinto, no habria palabra correcta para describirlo.

— No vas a perderme Arthur, hicimos una promesa

— Lo se

El resto del día Elena se la pasó jugando con Morgan y Charles, el niño estaba pintando mientras la cantante tocaba el piano con su hija al lado ayudándola con las notas altas, la paz duró unas horas hasta que Erik llegó con regalos para los niños. Las risas se oyeron por la mansión

— Ja ahora soy el tío favorito ¿verdad? — dijo con egocentrismo

— Tío favorito — hablo Morgan con la corona de reina en la cabeza

— Oist-

— Tío Finn — interrumpio la niña

— ¿Que? — pregunto indignado

— El tío Finn es mi favorito — respondió alzando sus pequeños hombros

Erik estiro su mano quitandole la corona

— Dame eso mocosa — gruño colocandosela él — No la mereces

La cantante le dio un golpe en el brazo por su actitud al ver la cara de Morgan pero esta se levantó acomodando su vestido, tomo la boina de Charles y se paro con la frente en alto

— No necesito una corona para ser princesa, mi papi tiene su propio reino y eso ya me hace una — dijo mirandolo con una ceja alzada

— Mírala — abrió la boca indignado

Tommy quien observaba todo desde el marco de la puerta río, Morgan corrió a él quien la recibió con los brazos abiertos y la alzó

— ¿Verdad que si?

— Si, papá tiene su propio reino — dijo sonriendo — Y tu ya tienes tu corona

— En tu cara tío Erik — hablo sacandole la lengua

Le acomodó mejor la boina de Charles, en ese momento Elena permanecio callada con la mirada ida en su hija, la boina en su cabeza le generó un conflicto en su mente.
Los relatos de las mujeres que entrevisto se repetían en su cabeza incluso sintió una lágrima silenciosa caer por su mejilla, esta la limpio antes de que alguien la viera pero fallo. Charles la estaba viendo
Se paro del sillón pero con tanta rapidez que un mareo la destabilizo, Erik fue más rápido tomandola antes de que se diera la cabeza contra la mesa de café

— Elena ¿te encuentras bien?

— Yo.. solo me pare muy deprisa — contesto pero su vista se nubló

— ¿Mamá?

Sus oídos pitaron y su vista terminó por volverse oscura, se desmayo en los brazos de Erik. Los niños se asustaron demasiado y Tommy también, la recostaron en el sofa mientras un doctor venía era obvio que su cuerpo reaccionaria así a la falta de sueño, el doctor llegó a revisarla estaba despierta ya con la cabeza doliendo como nunca antes.

— Debe descansar bien señora Shelby, su cuerpo no pudo con tanto cansancio — reprendió el doctor — No puede estar así

— Esta bien doctor — hablo

— Su presión arterial estaba alta, ¿ha recibido noticias fuertes en estos días?

— No para nada — mintio

Tommy estaba sentando en el sofa tomando la mano de su esposa y noto las marcas de uñas en la palma de su mano, cuando el doctor se fue solo quedaron los tres ya que Erik hizo a los niños ir a sus habitaciones.

— Elena, puedes mentirle al doctor pero no a mi — comento Tommy con seriedad

— Tommy, solo fue un mareo — dijo poniendose el paño de agua fría en la cabeza

  Su esposo no dejo de mirarla buscando alguna otra herida, permanecía recto y pensativo aquello la ponía nerviosa. Pues Elena no había encontrando el momento para decirle lo que estaba haciendo en estos últimos días, Tommy no era tonto y ahora lo tendría encima como un halcón tenia que confesarle su plan de hundir a Oswald Mosley y no esperaba una buena reacción de su parte.

Million Dollar Man - Tommy shelby Donde viven las historias. Descúbrelo ahora