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No podía quedarse tirada en ese sofá así que no dudo en ponerse en marcha para evitar que Arthur volará el tren, no fue hasta la segunda cuadra corriendo que Finn se le unio, minutos fueron los que les faltaron en ese momento cuando el olor a pólvora se mezclava con el aire puro y quemaba sus fosas nasales, corría todo lo que podía junto a Finn a su lado pero fue tarde, la explosión hizo temblar el suelo y los envio hacia atrás ocasionando que todo ocurriera en cámara lenta, se desplomaron contra el suelo de tierra y los ojos de Elena reflejaban el fuego mientras los pedazos volaban por todos lados, imaginándose los gritos de aquellos inocente que ahora habían pasado a la otra vida ajenos del por qué.

-Finn..-lo llamo alzando un poco la voz.-Mirame!

-Estoy bien, tranquila Elena.-le confirmo pero no convenció a la mujer

Su rostro lastimado busco a Finn quien lucia tan pálido como un papel, lo ayudo a pararse para ir en busca de los demás. 

-Elena!.-grito Arthur al verla.-Que haces aquí

-Yo..

Nisiquiera terminó de hablar cuando los brazos de Elena apretaron el cuerpo de Arthur como si este fuera a desaparecer derrumbándose en el suelo junto a él, John estaba observando todo desde el otro extremo de aquél lugar totalmente ajeno a todo, el llanto de la mujer era desgarrador que hacía doler el corazón de ambos hermanos, parecíera como si le estuvieran clavando una estaca una y otra vez, Elena no paraba de susurrar disculpas sin parar mientra Finn estaba parado del otro lado escuchando todo con angustia

-Lo siento, si tan solo yo lo hubiera evitado.-sollozo quebrando su voz y mojando la camisa de Arthur.-Si tan solo hubiera llegado antes

-Ya nada podemos hacer.-susurro Arthur

Este apreto su cuerpo contra el de ella queriendo reconfortarse por lo que acaba de hacer, la máscara de su rostro cayó cuando sus ojos se encontraron con los lagrimosos de Elena, la cantante posó sus manos en el rostro de Arthur secando aquellas lágrimas que él no sabia que habían empezado a salir.

-Debemos irnos, vayamos a casa.-sugirio John viendo a Finn seguir viendo el desastre que dejó el tren

Esa noche al volver a la mansión luego de que Arthur y John quedarán en sus casas, Elena estacionó el coche de Michael quedando en la entrada, apoyo su rostro sobre el volante y se detuvo a pensar unos momentos enumerando todo lo que debía pasar, Tommy aún no estaba en la mansión y no sabía dónde se había metido pero si sabía dónde estaba Tatiana Petrovna, así que ya dispuesta a su segunda matanza entró a la casa tomo unas cosas y volvió a salir para girar la llave del coche así ponerse en camino hacia allí pero antes pasaría por unos viejos amigos.

-Vamos a por esa maldita rusa.-gruño haciendo sonar su cuello

Tommy se encontraba en esa calle de tierra con Tatiana Petrovna frente de él, todo de esa mujer le daba repugnancia más la forma en que quería meterse en su cama, el intercambio sucedió rápidamente ambos estaban muy ocupados para ver a Elena escabullirse en el coche de la duquesa, luego de eso un disparo se oyó Tommy se giro con el arma en la mano pero solo vio al hombre muerto.

-Dale mis saludos a tu esposa.-dijo Tatiana con burla.-Dile que la próxima no haga amenazas vacías

-Mi esposa no hace amenazas vacías.-defencio Tommy.-Mante tus ojos abiertos porque tal vez este más cerca de lo que crees

-No me asusta su esposa, señor Shelby.-alzando sus hombros con desinterés

-Haces mal, deberías estar totalmente asustada -contesto con frialdad.-Ella es capaz de muchas cosas Tatiana, que hasta incluso a mi logran asustarme..

Cuando ambos subieron a los respectivos coches, Elena permanecio escondida en el asiento esperando el momento justo para actuar, Tatiana Petrovna manejaba tan rápido que en segundos habían dejado atrás el lugar de aquel intercambio, la mujer pasó junto al coche de Michael que había sido llevado por Edgar el amigo de su padre, fue en ese momento donde Elena salió de su escondite rodeando el cuello de la duquesa con el collar del ruby azul para apretarlo con fuerza, esta solto un quejido de dolor pisando el freno de golpe ocasionado que este se detuviera. Sus ojos se encontraron con los de Elena por el retrovisor, una sorpresa apareció entre su iris viendo el rostro lastimado de la cantante y sus ojos inyectados por las lagrimas que había derramado.

-Pensaste que te saldrías con la tuya querida?.-le pregunto apretando más viendola luchar por respirar.-Creiste que podrías meterte con mi familia y salir ilesa.

-M-maldita.-gruño sin poder respirar tratando de quitarse el collar que estaba siendo manipulado por Elena

-Oh Tatiana, debiste lavarte la boca antes de decir que hago amenazas vacías.-le susurro en el oído con su voz fría aquella que el padre Hughes escucho antes de morir

Sus guantes negros evitaban que el material de la cadena que conformaba el collar resbale así que apreto aún más disfrutando de ver el rostro de Tatiana Petrovna totalmente asustado, el color carmesí de sus mejillas convensaben a desaparecer y sus labios se ponían pálidos.

-Te dije que serias la siguiente.-hablo Elena.-El padre Hughes ya debe estar en el infierno y tu estas apunto de hacerle compañía

Río cuando la mujer dejo de luchar por respirar muriendo, dejando caer su peso muerto hacia atrás, Elena verifico su pulso por última vez y coloco el collar en su cuello con el ruby azul brillando, la cantante salió del coche con las joyas para caminar hacia el coche abandonado de Michael llevando una sonrisa de satisfacción en su rostro.

-Edgar, hazla desaparecer.-le pidio al hombre lanzándole las llaves del coche de Tatiana

-Donde quieres que tire el cuerpo?

-No lo se, solo déjalo que flote hasta Vienna.-sonrio como asesina en serie

Nadie iba a buscar el cuerpo de Tatiana porque los amigos de su padre se encargarían de hacer desaparecer el coche y el cadáver en él, seguramente al día siguiente su cuerpo estaría llegando a  Vienna como ella había soltado, dejándose flotar por los canales con un collar de Ruby azul en su cuello sin duda eso seria una noticia muy interesante en el periódico.
Cuando tomo su regreso a casa dejo las joyas en la caja fuerte de Erik y partió a la mansión ya con el cansancio en sus ojos, queria echarse en la cama para poder dormir dos días seguidos pero algo le decía que no iba a poder ser posible aquello, vio el amanecer y a su esposo en la entrada. Cuando está se bajo no pudo siquiera terminar de caminar un paso que ya los brazos de Tommy la rodearon pretandola contra él con fuerza

-Donde te habías metido?.-pregunto preocupado después de tanto caos

-Dame un trago primero y luego puedo contarte todo.-susurro con lo poco que quedaba de su sentido del humor.

Nota: Medio aburrido el capitulo de hoy, lo lamento.. gracias por comentar y votar ♡

Million Dollar Man - Tommy shelby Donde viven las historias. Descúbrelo ahora