Million Dollar Man - Tommy shelby

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La llegada de la pequeña Morgan ocasiono un revuelo los visitantes iban y venían en la gran mansión, el encanto de la niña no tardo en notarse pero lo que más destacó fue que era una nena de papá, Morgan amaba que Elena le cante pero a la hora de dormir o calmarse los brazos de Tommy siempre lograban su cometido.

— El tío John es un tonto, en cambió tu tío Arthur es tu preferido — hablo el mayor de los shelbys con Morgan en brazos

— No, el preferido de Morgan soy yo — peleo John haciendo reír a la bebé

Erik se río en sus caras sentando aún lado de Charles

— Ninguno de ustedes lo es — hablo con egocentrismo — Yo soy su preferido, el tío Erik es el mejor

Finn entro a la habitación y cuando Morgan lo vio agito sus manitos llamando su atención, oh si creo que ninguno de los tres es su preferido. Luego de esas visitas 
Charles la hacía reír con caras graciosas y le contaba cuentos porque según él eso desarrollaría su inteligencia, nadie quiso cuestionar su palabra ni lo protector que era como hermano mayor, Elena se encontraba en la habitación de Morgan acomodando la pequeña ropa y tarareando una canción totalmente pensativa, sabia leer muy bien a su esposo para saber que algo lo tenia perturbado. ¿Acaso se arrepentía de formar una familia con ella? trago saliva ante tal ocurrencia, eso tenía que descartarlo porque sus ojos siempre brillan al ver a Morgan en los brazos de Charles, pero que le estaba ocurriendo estaba paranoico. Cuando vio lo dormida que se encontraba Morgan camino hacia la oficina, entró sin golpear encontrandose con su esposo apoyado en el escritorio mirando a la nada con un vaso de Whisky en su mano derecha, se detuvo frente a él y este levantó su mirada azulada.

— ¿Morgan ya se durmió? — preguntó pasando su brazo por la cintura de Elena

— Totalmente dormida — asintio suspirando

Se apoyo a su lado y se cruzó de brazos, que debía decir ahora cuando nisiquiera sabia poner en orden lo que pasaba por su cabeza, el aniversario de la muerte de Rose se acerca y todo era un torbellino de emociones, el silencio en la oficina la sacó de quisio al igual que la sensación de que algo no marchaba bien.

— Tommy estoy preocupada — confeso mirando al suelo — No quiero agobiarte ni hacerte sentir como si estuviera invadiendote pero algo te ocurre y necesito saber que..

Se detuvo abruptamente antes de lograr soltar esas palabras que temia decir, Tommy dejo aún lado el vaso de Whisky

— Necesitas saber que Elena? — preguntó Tommy para que prosiguiera

— Que no es por nosotros, que no te arrepentiste de esto — comento levantando su mirada hacia él

El perfil de Tommy lucia tan dominante, no la estaba mirando a ella y eso generó un conflicto en su corazón. Los años pasaban pero la belleza de su esposo seguía intacta

— No quiero volver a escuchar algo así saliendo de tu boca — hablo girando hacia ella

La tomó de la cintura pegandola a su cuerpo, el agarre era fuerte y firme ocacionando que suelte un jadeo, su corazón lateo con rapidez y reaccionó ante su toque.

— Tommy.. — suspiro apenas

La subió arriba del escritorio y se posiciono entre sus piernas, su perfume la embriago por completo al igual que la cercanía de su cuerpo contra el de ella, él sabía que con un simple roce Elena estaría lista a su merced. Tommy molesto era otro tipo de goce y vaya que se molesto cuando la cantante planteo esa duda

— Jamás vuelvas a decir eso — gruño tomandola de la nuca — Jamás, ¿me escuchaste?

— Si, mi señor — contesto encendiendo a Tommy ante el tono empleado

Sus labios estaban sobre los suyos y el salvajismo era un detonante para el calor que su cuerpo estaba generando por tal acto, ella mordió su labio escuchándolo soltar un gemido y al separarse las pupilas de Tommy estaban dilatadas, una verdadera obra de arte.

— Buena chica — susurro tomandola del cuello — Te he dicho lo hermosa que luces con ese vestido

— Tommy no nos desviemos del tema — hablo de nuevo — Necesitamos charlar sobre lo que te esta pasando

El hombre siguió mordiendo ligeramente su hombro desnudo y repartiendo besos hasta su cuello, queria distraerla lo sabía muy bien pero lo peor era que estaba funcionando, hacía mucho calor ya

— Shhh — posó un dedo entre sus labios — ¿Sabes lo que quiero ahora? Quiero hacerte otro bebé

La frase causó un revuelo de hormonas en Elena que entre abrió sus labios permitiendo que Tommy introdujera su dedo pero la cantante reacciono ante el engatuzamiento fingiendo que iba a lamerlo y termino por morderlo, este se quejó mirando su dedo

— Thomas Shelby estoy hablando enserió — dijo tomándolo de los tirantes — Puedes dejar de pensar en sexo

— Eres muy malvada

— Si puedo ser malvada y muchas otras cosas más — dijo coqueta viendo como acercaba su rostro al de ella de nuevo — Pero ahora no es el momento

Este bufo y Elena rio por la indignación de su esposo, lo tomo del rostro con sus dos manos acariciando sus mejillas. Lo veía allí en su iris algo le estaba molestando

— Te amo — dijo casi suspirando — Y me preocupo por ti, se que dices estar bien pero no es una herida lo que me preocupa, sino tu mente.

— Aveces olvido que me case con la mujer más observadora del planeta, capaz de leerme con tanta facilidad — comento riendo

— Leerte y mucho más — sonrío con picardia

— Si sigues por ese lado no tendré más remedio que subirte ese vestido y hacerte mía encima de este escritorio — gruño advirtiéndole

Le gustaba jugar con fuego y sabía que decir exactamente para tener a Tommy muy emocionado

— No es como si no lo hubiéramos echo ya — menciono Elena — Me gusta que me tengas encima de tu escritorio aunque es más linda la vista desde a abajo

— Luego soy yo el que tiene que dejar de pensar en sexo — comento haciéndola reír

La tomó entre sus brazos descansando su caótica cabeza sobre el pecho de Elena, escuchando atentamente los latidos de su corazón, debia decirle que comenzaba a tener alucinación pero no quería quedar como un demente, sabía que podía confiarle lo que sea a su esposa aún así como iba a soltar eso. "Oye sabes veo un gato negro por todos lados" no iba a ser sencillo para nada 

— Dimelo cuando quieras — susurro Elena acariciando su nuca — Y buscaremos una solución juntos, no tienes que lidiar con esa guerra mental tu solo

Y ahí estaba la razón por la que Tommy se enamoro de Elena, ella le dio todo sin pedir nada a cambio. Era momento de que él le diera todo también, sinceridad, seguridad, amor y lealtad hasta que la muerte los separe.
Presentia que una gran prueba para su matrimonio se avecinaba pero estaba seguro de que no perdería a Elena Jackson por nada del mundo.. bueno casi seguro