Capítulo 7: La bruja alfarera.

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Separadores que encontrarás en esta historia.

&&& -> Cambio de escena. Ya sea que los mismos personajes estén en otro lugar o se relate una situación diferente con otros personajes en otro sitio.

+++ -> Un personaje está soñando.

*** -> Flashback / momentos del pasado.

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-¿Exactamente a dónde nos dirigimos? - preguntó Sasuke, caminando al lado izquierdo de Himawari.

Desde que presenciaron como Yura era quemada viva, llevaban un rato siguiendo el camino de llamas azules, a través de un terreno irregular rodeado de plantas desérticas y marchitas, a las afueras de Konoha.

-A ver a Enju. - respondió la joven, pateando una roca. - Si tengo suerte, a lo mucho, me pedirá lavar las ollas gigantes.

-¿Ollas gigantes? - pensó el muchacho, volteando a verla por el rabillo del ojo.

Y cuando estuvo a punto de cuestionarla por más detalles al respecto, se toparon de frente con una casa en ruinas, cuyos hoyos en el techo hacían posible que los rayos del sol traspasaran a diferentes habitaciones. Himawari, siendo la primera en llegar al pórtico, abrió la puerta de madera, dejando que Sasuke entrara primero.

El piso donde se encontraba, estaba unido a unas escaleras hechas de concreto. Bajando por ellas, veía asombrado las enormes montañas de libros y papeles que había a lo largo y ancho de la gran habitación.

Una antigua computadora de cinco piezas se encontraba prendida, en un escritorio al fondo. Varias cazuelas flotaban, con sustancias burbujeantes en su interior. Volteando al otro lado, se percató de los muebles viejos; cubiertos de polvo. Tubos de ensayo, frascos con contenido sospechoso, libros y más libros.

Entonces, a su derecha, miró una enorme pizarra verde, como las que se usan en las escuelas. Se acercó, teniendo cuidado de no pisar nada importante, y la examinó con más detalle. Cada frase que yacía ahí escrita, la había visto en la página de internet que leyó la noche anterior.

-Himawari, ¿Tu escribiste el blog de "Tokio escondido"? - preguntó, observando cómo se subía a una silla.

-Así que conoces mi trabajo. - comentó, abriendo una paleta de caramelo que encontró en el escritorio de la computadora y llevándoselo a la boca. - Bueno, eso explicaría porque viniste a Konoha en primer lugar.

Después de mirarla unos segundos más, Sasuke se giró de nuevo hacia el pizarrón. Las frases no era la única cosa que había llamado su atención. También, había varias fotografías de una mujer de piel blanca, ojos verdes y largo cabello blanco, pegadas de un lado a otro. Intrigado, levantó la mano a la altura de una de las imágenes y la tomó, analizándola más de cerca.

-¿Quién es esta mujer? - cuestionó seriamente, devolviendo sus ojos negros al pizarrón. - ¿La estás investigando o algo así?

-Su nombre es Tsubaki.

Al escuchar una voz diferente a la de Himawari, volteó de golpe hacia su izquierda, encontrándose con la lejana figura de una mujer alta, vestida con una capa negra y con una capucha que cubría su cabeza.

-Es una sacerdotisa de poderes oscuros a la que he estado siguiendo desde hace años. - agregó, acercándose.

La joven de cabello negro se levantó de la silla e hizo una reverencia.

-¿Usted es Enju? - interrogó el muchacho.

-Así es. - afirmó la mujer, quitándose la capucha para revelar su pálida piel, sus ojos y cabello rojos; atados en forma de una coleta pequeña. - Tú debes ser Sasuke Namikaze. ¿O debería llamarte, Sasuke Uchiha?

Haunted and Lost | COMPLETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora