Capítulo 31: La serpiente que acechaba niños.

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-¿Sabes lo que es la fruta Tsuchigumo? 

La pregunta de Naruto le cayó a Kushina como un balde de agua fría. Un par de segundos después, reaccionó y corrió hacia un librero en la sala. Se agachó al primer espacio y sacó de entre tantos libros, una carpeta que tenía escondida hasta el fondo del estante. Con aquel objeto en sus manos, volvió con los jóvenes y se sentó nuevamente.

-Lo que voy a contarles, no debe salir de aquí. ¿De acuerdo? – advirtió con seriedad.

Naruto, Sakura y Shikamaru asintieron, brindándole la confianza que necesitaba para poner la carpeta sobre la mesa y abrirla. El rubio fue el primero en asomarse, observando atónito las fotos de una auténtica escena del crimen. 

Sangre esparcida en las paredes y muebles de una sala que parecía acogedora... acompañada por dos cuerpos inmóviles en el piso. Había otras imágenes en las que el número aumentaba, poniendo nerviosos a la joven de cabello rosa y al pelinegro a su lado derecho.

-Hace 10 años, después de que Shikaku y yo rescatamos a Sasuke, Karui, una de nuestras compañeras, apareció con una gran cantidad de archivos, con casos similares al suyo que no habían sido resueltos. - sacó una de las fotografías de las carpetas y la deslizó sobre la mesa. - En el distrito de Suginami, era muy común que varias familias fueran masacradas. Y de esos misteriosos ataques, los hijos menores eran los únicos que sobrevivían. Siendo llevados a varios orfanatos de diferentes distritos, hasta que, luego de un tiempo, desaparecían sin dejar rastro. 

Asustada, la chica de cabello rosa se cubrió la boca con su mano derecha. 

-Por eso, llegamos a la conclusión de que, sin importar cómo, debíamos proteger a Sasuke.

-Entonces... - habló Naruto. - un demonio si lo siguió esa noche. 

Su madre asintió.

***

-¿Y recuerdas como era? – cuestionó Toga; el padre de InuYasha y Sesshomaru, observando atento a la mujer pelirroja, mientras entrelazaba sus dedos sobre la mesa de madera.

-Tenía piel pálida, cabello azul oscuro, corto, y sus ojos eran...

-¿Blancos?

***

Kushina sacó un cartel de la carpeta y lo colocó sobre la mesa. Esta vez, se trataba de una afiche que decía en grande "Hinata Hyuga", acompañada por la foto de una niña pequeña, su descripción física y un teléfono de celular. Shikamaru, al verla, comenzó a darse cuenta de a dónde iban los hechos.

-Hace poco, Toga Taisho, un amigo de mi jefe, vino a verme. – dijo Kushina. - En nuestra conversación, intercambiamos datos muy interesantes sobre este caso. Por ejemplo, que el nombre de la mujer de la serpiente es Tsubaki y que se trata de la principal sospechosa de varias catástrofes que han ocurrido en estos últimos años. Uno de ellos, el que más me impactó escuchar... - hizo una pausa, apretando los puños sobre sus piernas. - ...es la caída del sanatorio Akasuna.

***

-Quiere decir... - susurró Kushina. - ¿Qué esa mujer de cabello blanco fue la que asesinó a mi esposo?

-Tsubaki es alguien que no se detiene ante nada, con tal de conseguir lo que quiere. – agregó el hombre, recargándose en el respaldo de la silla y cruzándose de brazos. - Y el hecho de que haya derrumbado todo un edificio, solo para sacar de ahí a una pequeña niña como Hinata Hyuga, lo demuestra con creces. – indignada y molesta, la pelirroja se levantó de su asiento. Le dio la espalda y se cruzó de brazos, mirando el piso.

Haunted and Lost | COMPLETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora