Skater|| Vinnie Hacker

22

| Mascarillas. |

Ya había bostezado unas cuantas veces en lo que quedaba de la noche, habíamos llegado hace como un par de horas a casa, miré a mi lado y Vinnie estaba dormido en mi cama, otra vez. Había dicho que se quedaría despierto conmigo pero no duró mucho, y no iba a despertarlo, al igual que él, yo estaba cansada.

Bueno el sol nos había dado duro a todos, a Nailea la he oído cada siete segundos quejarse de que su cara parece tomate maduro o que se yo, y bueno mi cara no estaba roja ni nada porqué yo si me había echado bloqueador solar antes de salir de casa y tal, también intenté refugiarme bajo la sombrilla todo el tiempo que no estábamos en movimiento.

Quería darme una ducha porqué sentía mi cuerpo lleno de arena, y aunque ya me había duchado la sensación seguía ahí y me quejaba igual cada cinco segundos.

—¿Podrías dejar de gruñir? Quiero dormir.— Vinnie se acomodó sobre mi almohada, yo lo fulminé con la mirada aunque sabía que él tenía los ojos cerrados y no me veía.

Era una de esas razones por la que no me gustaba ir a la playa, odiaba la sensación de la arena en mi cuerpo una vez fuera de eso lugares.

Vinnie había ido a ducharse a su casa y luego vino, según él, las promesas se cumplen, pero yo lo veía durmiendo tranquilamente.

—«Me quedaré contigo hasta que termines el trabajo».—Dije lo que él me había dicho, no sé con exactitud si eso era lo que me había dicho, pero solo era para molestarlo un poco.

Él volvió acomodarse y me dió la espalda, lo miré ofendida. Pero luego lo escuché murmurar.

—Dije que me quedaría contigo, no dije que no me dormiría.

Yo bufé.

—Pues es igual que estar sola.— Comenté

Él volvió a voltearse y esta vez con los ojos entreabiertos me miraba, yo volví mi vista al laptop y ya casi terminaba el diálogo, resulta que no todo fue malo, al estar allá en la playa me habían surgido muchas ideas de como acabar con el trabajo.

—Si no quieres que me quede dormido ¿ya me vas a decir de que trata tu trabajo?— preguntó con voz ronca.

—Es un diálogo.— conteste simple.

—Eso ya lo había deducido yo solito.— parecía niño.

Yo rodeé los ojos mientras de soslayo veía como media sonrisa se le formaba en sus labios... sus labios, recordé el momento en el agua, agité mi cabeza para concentrarme, sólo una pagina más y ya acababa.

—¿Qué hora es?.— le pregunté ignorando lo demás.

Vinnie levantó su teléfono y me enseñó su pantalla. Una y cuarto, escuché ruido en la habitación de Nailea y luego pasos por el pasillo. De seguro iba a la cocina.

—¿de qué trata tu diálogo?.— preguntó expectante.

—De una pareja que al final terminan separados por una tercera persona.— expliqué rápidamente.

—¿y los detalles?.— preguntó y yo lo miré.

—Me gustabas más dormido ¿sabes?.