Capítulo 1. La llegada

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Me irrité cuando la canción "Old Me" de 5 Seconds of Summer se interrumpió bruscamente por la llamada entrante de mi madre. Esta ya era la séptima vez que me llamaba, y estaba segura de que no se detendría hasta confirmarle que había llegado a la escuela. Hice lo posible por pausar la música, quitarme los audífonos y contestar, ya que ser interrumpida en el mejor momento resultaba bastante molesto.

—¿Mamá? —respondí.

—¡Amy, cariño! —exclamó ella con alegría. Fruncí el ceño ante el diminutivo de mi nombre que me había asignado hace años—. Finalmente contestas, estaba preocupada.

—Ya llegué —respondí cuando el taxi se detuvo.

—Sé que puedo parecer insistente, pero es que nunca antes habías estado tan lejos de casa —expresó con preocupación.

—Fue decisión de mi padre mandarme a estudiar a Estados Unidos —le expliqué. Salí del taxi tras pagar y me quedé parada frente al lugar—. Es algo que me parece absurdo considerando que en Inglaterra también hay buenas escuelas.

—Él también estudió en Wonder Hall, es como una tradición familiar terminar la secundaria en ese lugar. Además, no creo que Florida sea tan malo.

—Claro, solo... Prométeme que cuidarás a Alani en mi ausencia, ¿de acuerdo?

—Es mi hija menor, por supuesto que lo haré.

Permanecí en silencio, aunque la angustia persistió tras esa respuesta. No era la primera vez que me alejaba de mi hermanita, pero esta vez sentía una preocupación mayor. Sabía que mi madre no estaría siempre en casa y no quería que se sintiera sola.

¿Es eso, o simplemente quieres protegerla de todo lo que te sucedió a ti?

Negué con la cabeza en un intento vago de apartar esa voz molesta de mi subconsciente y concentrarme en lo que era más importante. No era el momento propicio para tener recuerdos y pensamientos que solo me sumirían en la tristeza.

—Bien, tengo que colgar. Te llamo más tarde —dije para finalizar la conversación.

Guardé mi teléfono, entré y exploré el lugar con la mirada. El edificio, imponente y majestuoso, exhibía las características típicas de diseño de una secundaria privada. Frente a mí se extendía el jardín con numerosos árboles, plantas y una variedad de flores dispuestas con elegancia y armonía. Mientras caminaba, me topé con una estatua de un personaje histórico que no logré identificar, incluso divisé un pequeño lago con un puente, otorgándole cierto aire a un parque.

Al entrar al edificio, me detuve un tanto desconcertada, esperando ser recibida por alguien que me diera orientación. Sin embargo, las miradas se posaron sobre mí, seguidas por murmullos y gestos evidentes. Esto me hizo sentir incómoda, no disfrutaba ser el foco de atención en ningún lugar. Decidí continuar sin tener la menor idea de hacia dónde dirigirme.

Bajé la mirada, el sudor se deslizaba por los lados de mi rostro mientras mi corazón palpitaba con fuerza. Internamente, me recriminé, no podía permitirme un ataque de pánico justo en ese momento. Los murmullos se intensificaron y pude percibirlos con mayor claridad.

—¿Quién es ella? ¿Es nueva?

—¿Esa es la hija de Owen Bones? ¡Es mi escritor favorito!

—¿Creen que luego estudiará literatura como su padre?

—No parece la gran cosa, hay cientos de chicas como ella en este lugar.

—Escuché que estuvo internada en un hospital psiquiátrico infantil, al parecer no es del todo normal.

El fantasma de Wonder Hall ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora