Los Patrulleros Nocturnos: El Inicio de Gray Archer [Libro 1]

46: Feliz aniversario

Hoy podría decir que me siento bastante bien y feliz, por primera vez en mi vida, se lo que es estar feliz. Pero hoy no es un día cualquiera, no, hoy se celebran los treinta años en los que los héroes aparecieron en Nueva York para protegerla. Mi padre, el Comisionado, está preparando una fiesta junto al alcalde Charles para celebrar dicho evento. Y como siempre, todos estamos invitados, incluso yo debo ir con mi padre para iniciar el discurso del día, digamos que a mi padre le encanta que yo vaya a esas cosas y sinceramente es como salir de tu zona de confort, sin embargo lo hace por que me quiere mucho y también porque sabe que lo que él hace, yo también lo amo.

Si, mi sueño y carrera siempre ha sido convertirme en un policía desde que era un niño, pero con el tiempo fue cambiando y al final, quiero ser un detective privado, él ya lo ha aceptado y me ha dicho que si es lo que yo quiero, estaría muy feliz de verme convertirme en eso. Gracias al cielo lo hizo, por que sino, no se que hubiera pasado. Mi madre, bueno, pasaron meses para que por fin me diera el permiso y la aprobación de convertirme en detective, ella es muy sobreprotectora, y desde el día del accidente, siempre ha tratado de mantenerme al límite de mis habilidades, no obstante eso cambió cuando pasó lo de Gray Archer, así que lo aceptó orgullosa de mi. Mi hermana y Williams, lo han hecho más fácil, Elena solamente me dijo que si a mi me hace feliz, pues que adelante, que cumpla mis sueños, eso lo agradecí felizmente, que una hermana o hermano te apoyé, es lo mejor. Con Williams, bueno, pase horas sentado junto a él contándole las razones por las que quería ser un detective privado, y vaya que casi muero, pero agradezco mucho sus consejos.

Ahora mismo, estoy tan emocionado y con mucho, pero mucho sueño, que, solamente a mi padre se le ocurre sacarme a las siete de la mañana a comprar los trajes de gala para la gran fiesta y no sólo para esa, también por que hoy es mi día especial. Aunque aún no entiendo por qué compramos más trajes si ya tengo una colección de ellos que no uso, pero a él le encanta la perfección, Joder, quien lo aguanta.

—Daniel.

Mire a mi padre cuando me llamó, suspiré y despeje mi cabeza de dudas. Me acerqué a él para ver que quería. Él me miró y con una sonrisa de oreja a oreja, me enseñó el traje de gala color azul.

—¿Y? ¿Qué te parece? —preguntó más entusiasmado que yo.

—Está lindo, me gusta —hice una pausa y sonreí maliciosamente—, como todos los trajes que me has comprado.

Su sonrisa se desvaneció en segundos y lo cambió por un ceño fruncido, ¿que? Me encanta joderle la vida con eso, además sabe que estoy jugando con él.

—¿Ah, si? —preguntó levantando una ceja.

—Si. Padre, todos los trajes son iguales, ¿por qué comprar más?

Mi padre permaneció en silencio por un momento, que hasta yo creí que de verdad lo había lastimado.

—Solamente te preparo para la vida de adultez joven en la que pronto llegaras —dijo con unas lágrimas falsas cayendo por sus ojos.