El Ángel que bailaba con el Diablo: El camino de las Princesas 👑👑💕
👑Capítulo 16
Cinco dragones de mediano tamaño rodearon a Siry y a Caled, uno de ellos se acercó aun más y clavó sus ojos en los de la princesa. Aquella sensación de ser una presa nuevamente invadió el cuerpo de ella y la paralizó, pero para su suerte el joven Grifo estaba a su lado, dispuesto a todo para protegerla.
- ¡Siry, quédate detrás de mi! - exclamó y velozmente se adelantó para bloquear, sólo con sus manos, el zarpazo del dragón sosteniendo sus garras.
Aquello sacó de su terrorifico trance a la princesa - ¡Caled! - dijo, preocupada, mientras él resistía aquel ataque.
- ¡Estoy bien, tú no te muev- intentó decir pero se sorprendió al sentir como Siry, en un acto de arrojo, lo abrazó por la espalda y, mientras se aferraba con su mano izquierda al pecho de él, levantó su mano derecha casi sin darse cuenta en dirección al dragón y lanzó un hechizo de sueño a distancia que lo obligó a dormir, cayendo rendido al suelo.
Los demás dragones, un poco alejados, quedaron inmóviles por la impresión. Caled también volteó a verla - Siry... ¿Qué fue...
- N-No lo sé... - respondió mirando su mano derecha - Fue un impulso, no quería que te hicieran daño... - continuó y aquel segundo de paz se esfumó en el rugido de los otros cuatro dragones que se acercaron dispuestos a avalanzarse sobre ellos.
El joven Grifo la abrazó desesperado, preparado para alzar vuelo de nuevo pero pronto vieron como la bestial figura de Noré apareció dando un enorme salto por encima de los dragones, cayendo con toda la furia de sus patas sobre la cabeza de uno de ellos.
- ¡PAPÁ! - se sorprendió Siry.
- ¡¿Qué rayos están haciendo aquí?! - preguntó ya de espalda a ellos, protegiendolos - ¡Larguense ahora mismo, tú no tienes que estar en este lugar, Siry!
- ¡Pero papá-
- ¡Siry! ¡Es una orden! - terminó por decir y se lanzó dispuesto a acabar con aquellas bestias que los rodeaban.
La princesa observó como su padre tomó el cuello del dragón al cual había golpeado primero y lo utilizó para golpear a los demás haciéndolos caer. Sin dudas Noré era una criatura de temer en el campo de batalla, y más si alguien preciado para él estaba involucrado, por ello Siry podía intuir que él no se detendría hasta darles muerte así que se armó de valor y escapó de los brazos de Caled para salvar a los dragones de su inminente destino.
Corrió hacia su padre y, antes de que este pudiese usar sus filosas garras sobre ellos, Siry tomó la delantera intentando una acción desesperada.- ¡BASTA! - exclamó, angustiada, y agitó ambas manos delante de los dragones deseando en su corazón que sólo durmiesen.
Las bestias que peleaban frenéticamente de repente se detuvieron para luego desplomarse a los pies de la princesa.
Noré quedó perplejo al verla - Siry... - murmuró detrás de ella.
- Ya es suficiente...
- ¿Qué?...
- Nadie tiene que morir... ni demonios, ni dragones, nadie merece esto... Nadie sabe porqué está peleando aquí... - continuó ella y se inclinó para tocar la cabeza del dragón que su padre había herido y lo sanó - Estos dragónes no saben porque están aquí, sólo pelean porque alguien les dice que lo hagan, por eso se levantan una y otra vez a pesar de sus heridas para pelear ciegamente... Estoy segura que en el fondo están asustados por no entender qué sucede, nosotros también estamos asustados porque tampoco lo entendemos y así, al final, todos peleamos dominados por el miedo, incapaces de siquiera tratar de entendernos... yo no quiero esto... - dijo y nuevamente se puso de pie mientras le daba la espalda a su padre y enfocaba su mirada al campo de batalla - Por eso, porque conozco lo maravillosos que son los dragones, aunque en este momento parezcan una amenaza para nosotros, yo protegeré sus vidas... - afirmó dándole una última mirada a Noré - Lo siento, papá, pero esta vez no puedo obedecerte... - terminó con una tímida sonrisa y corrió directamente a la zona de confrontación.
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El Ángel que bailaba con el Diablo 2: Recuerdos en el Infierno
FantasiDespués de los hechos de la primera parte, Noré continúa amando en secreto a Anaciel, haciéndole compañía en su forma de ave cada vez que ella bajaba al mundo humano, esperando así el momento indicado para aparecer nuevamente ante ella. Pero todo se...