| Sanemi Shinazugawa |

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MODO DE NARRACIÓN: tercera persona (ellos).

En una ciudad no muy grande, donde las luces brillaban tando que ni siquiera parecía ser de noche, había un joven

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En una ciudad no muy grande, donde las luces brillaban tando que ni siquiera parecía ser de noche, había un joven.

De rostro refinado, ojos ___ brillantes, piel ___ que lucía bastante suave, de cabellos ___ largos/cortos y con pecas esparcidas desde sus mejillas hasta el puente de du nariz, de nombre ________ Komori y con la edad de 19 años.

Cualquiera que lo vea quedaría encantado y embobado por lo bello que era.

Lo suficiente como para que no se percataran cuando sus billeteras desaparezcan.

-Oh, lo siento señor━murmuró con 'pena' luego de haber chocado con aquel adulto de cabellos castaños.-

El hombre se giró un poco para verlo, sonriendo y palmeando la cabeza del chico.

-No te preocupes, ten más cuidado la próxima.-

-Enserio muchas gracias, lo haré━tomó la mano del mayor y la estrechó acompañándola con una reverencia.-

La esposa de aquel hombre llegó cuando el menor se había retirado de ahí con una sonrisa y perdiéndose entre la gente.

-Pero que muchacho tan educado━dijo con una sonrisa y mirando por donde se fué.-

-Sí, es cier- ¡¡Mi reloj, desapareció mi reloj!!-

-¡¿Cómo?! ¡¡pero si lo tenías hace un momento!!-

________ sonrió en grande, sacando de la manga de su kimono aquel reloj de oro que tomó del mayor cuando estrechó su mano.
Riendo por lo bajo volvió a guardarlo para seguir cruzando entre las múltiples personas que había en aquel lugar.

-Lo siento, disculpen, voy a pasar━esquivó las personas, evitando a toda costa tocarlas mientras de manera delicada tomaba las billeteras que estaban mal guardadas en su bolsillos traseros.-

A aquel paso tardarían algunos minutos en percatarse de sus objetos faltantes, suficiente tiempo como para escapar a un callejón.

Eso estaba por hacer de no ser por un  un idiota que se cruzó en su camino, haciéndolo chocar esta vez de verdad.

-Oiga, tenga más cuidado━murmuró con algo de fastidio.-

Por fortuna, nada de lo que robó cayó al suelo o podría delatarlo. Miró con quien había chocado y el nerviosismo se apoderó de él, pues la cara que tenía no parecía para nada agradable.

-Tu fíjate por donde vas, mocoso━el peli-__ rodó los ojos, hasta que su vista enfocó algo que tenía amarrado a la cintura aquel extraño.-

Una katana. ¡si la conseguía podría venderla a un valor muy alto!
Pues por como era, no parecía ser para nada común.

Aphrodite | Kny x male! readerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora