━━¡One shots!
hay miles de historias donde puedes estar con tu personaje favorito de Kimetsu, pero, no hay muchas donde seas un chico.
este 'libro' te da la oportunidad de serlo! pasa y diviértete!
¡con mi imaginación activa me es imposible estar...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Eres un Kocho, para acortar mejor todos los rodeos.
Siendo mayor que Kanae, tu difunta hermanita menor que al llevar el peso de su muerte, sumado a tu nuevo puesto como Pilar, el cuidado de Shinobū y Kanao, las tareas de la Finca de las mariposas que manejabas junto a tu segunda hermana y aún el hecho de que tenías que mantener una sonrisa enfrente de todos tus seres queridos era difícl. Muy difícil.
En algunas ocasiones terminabas tan cansado que dormías por horas y despertabas hasta casi las 7:00 p.m, justo a tiempo para que tengas que salir a una misión. Justo como en esta ocasión.
Mantenías una relación secreta con el mismísimo Pilar del Agua, sí, ese mismo amargado que tu hermana detestaba por su actitud tan fría e 'indiferente', por esa misma razón su relación era secreta. Pero que de alguna forma logró robar tu corazón y hacer que tus mejillas se coloren a tal grado de hacerle competencia a una cereza en su punto más maduro.
En esta ocasión, tu amado y hermana menor tuvieron una misión junto a ti. El ambiente era algo incómodo debido a que no podías entablar una conversación con Giyū, pues Shinobū siempre encontraba un modo de distraerte y que no hablaras con él. Lo cual notabas pero decidías ignorar para no hacer todo más incómodo.
-nee~, hermanito, ¿estás seguro de que la misión es en este pueblo?━preguntó la de menor estatura entre los tres, dirijiéndose a ti.-
-Estoy seguro, a menos que Kiki se haya equivocado...de nuevo━le contestaste con algunas gotas de sudor bajando por tu nuca, ya que tu cuervo casi siempre se equivocaba a la hora de dar indicaciones.-
Ella no dijo nada más y se dedicó a mirar los alrededores en completo silencio, notando como todo el pueblo lucía tan solitario que llegaba a ser depresivo en cierta forma.
Giyū solo caminaba a tu lado sin decir nada, con la mirada concentrada en el suelo como si fuera la cosa más interesante en el mundo. Tú lo mirabas de reojo, hace días que no habían pasado tiempo juntos y eso de seguro lo tenía algo desanimado. Lo llenarías de besos en cuanto Shinobū se distraiga ya que sabías que el oji-azul solía ser reservado pero eso solo indicaba que necesitaba de constantes muestras de afecto, y tú como su pareja ¿cómo no darle todo tu amor?
-Shinobū━la llamaste en un susurro, deteniendo tus pasos de golpe y estando alerta hacia cualquier lado.-
Ella comprendió a que te referías así que imitó tu acción, manteniendo su mano en el mango de su nichirin pero sobre todo su postura relajada para fingir que ninguno de los tres se había percatado de la presencia del posible demonio cerca de ustedes.
El aire era perturbado por un fuerte e intenso olor que los obligaba a cubrirse la nariz por lo nauseabundo que llegaba a ser, gracias a esto no podías identificar de donde provenía para poder atacar primero.
