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Hyunjin entró a su habitación aun con la duda de a donde querría llevarlo Minho, sin embargo, dejó de pensar en eso enseguida al ver a Jisung sentado sobre la cama de Chan, dándole la espalda.

Cerró suavemente la puerta, cuidándose de no hacer ruido. Se fue acercando lentamente. Jisung solo estaba sentado, quieto, con la almohada de Chan entre sus brazos. Hyunjin alzó una ceja. ¿Qué demonios querría él ahora?

—¿Qué haces aquí?— le preguntó cuando estuvo a solo unos pasos. Jisung pegó un brinco y se alejó instintivamente de él, a la vez que soltaba la almohada.

—Hyunjin... hyung.— contestó.— No te sentí entrar.

—No tengo porqué anunciar cuando entro a esta habitación. Sin embargo, tú sí...

—Quería hablar contigo.— Jisung juntó aplomo de repente.— Y es una charla seria.

Hyunjin alzó de nuevo su ceja.

—¿Qué podrías querer tú conmigo? Yo no soy rubio, robusto y me llamo Chan, ¿no crees que te confundiste de hyung?

Jisung decidió ignorar el comentario irónico del mayor y se acomodó cruzando los pies sobre la cama.

—Siéntate, hyung.— le pidió señalando la superficie frente a él.— Y sé perfectamente que no eres Chan. Es contigo con quien quiero hablar.

Hyunjin se dejó caer sobre la cama de mala gana. Hace un minuto había estado de muy buen humor, pero, por alguna razón le daba la sensación de que Jisung estaba a punto de arruinar eso.

—Ya sé que eres un híbrido, hyung.

¿Por qué carajo tenía que tener razón en momentos como ese?

Hyunjin le dedicó una mirada amenazante a Jisung. Notó como el humano pasaba saliva, a pesar del aplomo, Jisung estaba nervioso, y Hyunjin estaba más que dispuesto a aprovechar eso.

—¿Y? ¿Qué planeas hacer con eso?

—Sé que no quieres que Minho se entere.— Hyunjin sabía que Jisung estaba tratando de ponerlo nervioso a él también, pero eso iba a ser imposible.

Jisung no transmitía la más mínima intimidación. Hyunjin había enfrentado a un montón de alfas a los cuales Jisung no les llegaba ni a la suela. Si quería ponerlo nervioso iba a tener que ponerle un poco más de ánimo.

—Si se lo quisieras contar estarías con él, no aquí, hablando conmigo.— Hyunjin se rascó el cabello, impaciente.— Así que dime que quieres de una buena vez.

—Chan.— contestó Jisung.

—¿Qué hay con Chan? Creo que ya quedó claro que no hay nada entre él y yo.

—Lo sé. Precisamente por eso.

—No te estoy entendiendo.

—Ayúdame a conseguir a Chan.

—¿Qué?— esta vez Hyunjin sí que no pudo evitar sorprenderse.— ¿Estás loco? Chan... Chan no...

—Sé que Chan es un híbrido. Y no me importa. Me gusta. Tienes que ayudarme.

—No, no tengo que hacerlo.

—Se lo contaré a Minho si no me ayudas.— Jisung se puso de pie de un brinco.— ¡Puedo ir ahora mismo!— Intentó salir de la habitación pero Hyunjin lo detuvo y de un tirón lo sentó de nuevo sobre la cama.

—¡Cálmate! ¿Quieres?— soltó aire, irritado.— No sabes lo que estás diciendo. Chan no te gusta, solo es un enamoramiento pasajero.

—No puedes decirme eso cuando eres tú el que deja que Minho le meta la lengua hasta la tráquea.

*.✧ No se admiten mascotas!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora