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Emily Lestrange

Son exactamente las tres de la mañana, un golpe repentino me despertó, al asomarme por la ventana la ví a Kaia haciendo señas. Al abrir la ventana me asomé, cayendo mi cabello sobre mis hombros.

-Psss- hace un leve sonido Kaia

-Kaia, que sucede?- pregunto confundida rascandome los ojos por la luz que da de golpe.

-Ven, vamos a casa. Necesito contarte algo.

-Kaia son las tres de la mañana.

-Es muy importante Emily, por favor.

Sin mas decir me puse lo primero que encontre a mano, desenchufé mi telefono y baje silenciosamente los escalones. Abrí la puerta trasera y salí por ahi.

Ahi estaba ella, sujetó mi brazo y nos dirijimos a su casa, al entrar, fuimos hasta su habitación.
Era rosa pastel con posters de chicos lindos, me deje caer sobre su acolchonada cama, deje mis cosas en la mesita de noche y ella se sentó junto a mi.

-Mira, y‐yo creo que me gusta alguien-su nerviosismo le jugó en contra.

-Oh Kai, que linda noticia- esboce una sonrisita de lado- Y de quien?.

-Emm, conoces a Rhet, Rhet Lombardi?.

-Sinceramente si.

-ESPERA QUE?!- comenzó a sudar mucho y el ritmo desus dedos tronando fue acelerandose en cuestion de segundos.

-Kai Kai Kai, shh espera, deja de hacer esto que te va a hacer mal- sujete sus manos y las mantuve asi un tiempo hasta que comenzo a calamarse - El es mi amigo- su ritmo cardiaco disminuyó y recosto su cabeza en mi hombro.

-Kai, vamos a tomar un poco de agua. De acuerdo?.

-Ve, yo estoy bien.

Fuí hasta la alacena para sacar un vaso, Leight Flemming entro de repente junto a el mayor de los Stein

Heist

Estaban besandose apasionadamente, notaron mi presencia y subieron directamente hacia las habitaciones.

Mi cabeza comenzó a doler demaciado y dejé el vaso sobre la mesa. Unos anillos frios hicieron tacto con mi piel logrando que se erizara, justamente en mi cintura. Un susurro hizo pasar una olad de escalofrío por todo mi cuerpo.

Carajo

-Porque estas cerca de la muerte siempre, Emily?.

-No lo se, porque no lo averiguas vos.

Sujeté su cuello y lo deje contra la pared -No olvides que yo soy el monstruo aqui Frey, no me retes. No te conviene.

-Chicos, las habitaciones estan por alla-pronuncio la chica de ojos claros mientas señalaba hacia las escaleras.

Frey sonrio y subió las escaleras.

-Kai, lo de la habitacion estaba de más, te fuiste al pasto.

-Hay MUCHA tensión entre ustedes dos.

-Pfff, claro que no.

-Claro, y mi papa es Leonardo Dicaprio.

-YA

Sin decir mas subimos a su habitacion.

En la mitad de la noche, al rededor de las cuateo ocinco de la mañana. Mi vejiga pedía a socorros de un baño, Kai esta dormida profundamente. No podíadespertarla, pero no me quedaba otra.

Carajo

La movi un poco, lo unico que consegui fue que me dijiera "Dejame dormir con Rhet". Obviamemte no pare de reirme como la buena amiga que soy

My strange addiction - Frey SteinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora