8. Fragante Elim.

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—Qué malo eres; ni siquiera le diste una charla de introducción a la "vida con pene" —lamentó Hoseok seriamente, parado de brazos cruzados a media escalera. Su mirada se iluminó de repente—. Ahora tendrá que preguntarle todo a Mr. Miau Miau ¡Oh! ¡Le verá los pompones al gatito! Pero yo no estaré ahí —. Jungkook lo miró asqueado ¿El puchero en el rostro de Hobi era real? ¿Estaba haciendo berrinche "por eso"? No quería saber.

—¿Para qué quieres verle las bolas a ese gato?

—Cutie~ —rió avergonzado, sin palabras para explicarlo— ¡Ya! No me mires así; no es un fetiche, sólo que me hacen mucha gracia los gatos.

—¡Agh! ¡Hoba~! No hay nada que preguntar ni mirarle a nadie, mucho menos a ese sádico de garras filosas.

—Lo dice quien le pegó los ojos al ex-angelito desnudo ¡Puerco! Lo estás saboreando en tu mente ¡Yo sé!

—¡Me sorprendí, es todo! ¡Inventas cosas! —reclamó sentándose en la cama de golpe, revisando su teléfono para ignorarlo. Inconscientemente, en confianza por estar en su habitación, acomodó su ropa interior con expresión de fastidio... Hobi siempre bromeaba, pero no estaba equivocado.

—¿Tu vampiro interno quiere hacerle cositas al chico bonito? —alzó las cejas viéndolo con picardía, buscando ser cómplice. Sólo logró que Kook entorpeciera sus acciones con el ceño fruncido, sin dirigirle la mirada— Ahora que no está del todo prohibido... Podrías aprovechar que está en la ducha para enseñarle un par de cosas, o ¿Esperas que descubra solito cómo complacerse? Duerme en tu cama, qué pena; fijo será mientras tú estés a su lado de mirón.

—¡Ya cállate, Hoseok! —El teléfono resbaló de sus manos nerviosas, momento oportuno para bajar la vista a la realidad y cubrirse la entrepierna con un cojín— ¡Y-yo no-

— ¡Oh! —exclamó escandaloso; la canción llegó a su mente;— Smooth~ like~ Butter~

Como su inteligencia permite a un galdro aprender hechizos y hacer buenos negocios, o la ternura de un catzul atrae el afecto de sus amos; los léuzur, al obtener su energía del sexo con otras razas, gozan de ciertas ventajas para el acto... Una de ellas era la lubricación: hombres y mujeres por igual, al menor estímulo y con envidiable, aunque a veces incómoda, facilidad. La sensación resbalosa no se limitaba a donde debería sino que se extendía hasta el comienzo de la espina, atrás... "Por si acaso te gusta", decía la naturaleza, mientras Kook maldecía aventando cojines a su amigo burlón.

"Smooth~ like~ butter~", cantaba Hobi. "Suave como mantequilla", haciendo referencia al miembro erecto y resbaloso de un léuzur cual barra de mantequilla entre las manos, ahogándose en carcajadas. La broma era irresistible; su amigo ya no podía negar cómo el subestimado "conocido" en el baño, estimulaba su subconsciente con intensidad sin precedentes.

—¡No estoy pensando en eso! ¡Es... —avergonzado como nunca, Kookie se hizo bolita sobre una almohada para ocultar la cara y otras cosas vergonzosas.

—¿Irresistible?

—¿No eres tú quien me acusó con Jin? —bufó incrédulo, buscando un zapato para aventarle.

—¡Porque creí que no podrías quitarle energía a Tae jamás! Las cosas acaban de cambiar —Hobi tenía un buen punto, salvándose de la gran bota alzada en alto por Kook.

Jungkook hubiese querido disimular cuán seriamente lo estaba pensando, mas se quedó tieso con la mirada ida. ¿Tae... estaba disponible? en términos prácticos; sí. Pero ¿Su energía sería suficiente para ambos? Era difícil de calcular. «Tampoco es que esté enamorado de él; es sólo una idea, mínima posibilidad»... Sí, claro. La mayor duda ¿Estaba seguro de querer tomar aquel camino y no el mismo que su hermano? Solía cambiar de opinión como de ropa interior. Kook era un adulto sumamente inseguro y cobarde en cuanto a las decisiones importantes de la vida.

Blanco y NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora