Si, Señor

Capítulo 23 : Nicole

No encontraba cómo procesar todo lo ocurrido , eran tantas emociones y situaciones que no sabía en cuál pensar.

La repentina aparición de mi padre y mi hermano después de varios años sin saber de ellos me hacía preguntarme una y otra vez ,¿Por qué aparecer ahora?

Nunca se preocupo ni siquiera si iba a la universidad o no, como para ahora interesarle con quien salgo o lo que hago.

—Deja de pensar en ello —La voz de Edrik me saca de mis pensamientos —. No te agobies por lo sucedido.

—¿Tanto se me nota?

—Estas pensativa desde que nos subimos al jet, incluso Dante lo ha notado y parece preocupado.

Lo miro a un lado y lo veo mirarme disimuladamente mientras teclea en su computador.

—No pienso solo en lo ocurrido, si no también en Nicole .

—¿Qué pasa con ella?

—¿Como reaccionara al saber que su papá tiene un relación con una mujer tan joven? , cuando mi madre murió y papá me presento a su prometida de tan solo dieciocho años me enoje mucho al saber que era una chica mucho más joven que él, quizás pase lo mismo con ella.

—No son situaciones iguales, Dante tampoco es que te doble la edad —Ríe y me abraza—. Debes relajarte , verás que no será así.

—Esperemos tengas razón .

Aterrizamos en Texas en horas de la madrugada, al bajar del avión nos reciben algunos hombres los cuales nos guían a dos camionetas .

En la primera sube Paulo, Maite y Alex, en la segunda Edrik, Dante y yo .

Luego de una hora camino entramos a una hacienda en la cuál vemos varías hectáreas llenas de trabajadores y animales. Llegamos finalmente, Dante me ayuda a bajar y somos recibidos por algunas personas del personal que nos dan la bienvenida.

Al entrar Edrik y Alex se despiden subiendo a sus habitaciones , Maite y Paulo hacen lo mismo quedando solamente Dante y yo .

—¿En qué habitación me instalaré ?

—¿En qué habitación ? —Asiento —. Dormiremos en la misma habitación ¿O acaso pensabas dormir sola?

—Pensé que quizás querrás dormir solo.

—Pensaste mal y ya deja de pensar esas cosas —Toma mi mano y subimos las escaleras —. Vayamos a descansar, estoy sumamente agotado .

Entramos a la que será nuestra habitación, retiro mis zapatos, el hace lo mismo y nos acomodamos en la cama abrazados dejándonos llevar por el sueño debido al cansancio.

***

Me despierto al escuchar los relinchos de
algunos caballos .

Tanteo a mi lado y no rastros de Dante, observo el reloj a un lado de la mesita y es pasada las nueve de la mañana.

Me levantó estirando un poco mi cuerpo, me acerco a mis maletas , saco algo de ropa , zapatillas deportivas y voy por una ducha.

Al bajar escucho algunas risas , me acerco al salón que provienen y me encuentro con Edrik, Paulo y Maite en una gran mesa desayunando.

—Buenos días. —Me dicen al unísono Maite y Paulo.

—Buenos días bonita —Edrik se levanta y me abre la silla a su lado —. Toma asiento, ya traen tu desayuno.

—Buenos días, ¿Dónde están Alex y Dante?

—Salieron desde temprano —Responde Paulo—. Y creo que estarán fuera parte del día.