Encontrados

Prologo

Estoy corriendo

Y no estoy escapando de nadie—aunque lo parezca— es solo que tuve una mañana horrible.

Si rebobinamos, esto fue lo que me pasó: mi alarma no sonó por lo que no me desperté a tiempo; no tenía nada en mi alacena por lo tanto tampoco desayuné y por último el taxi que estaba apunto de tomar, lo agarro una señora de 60 años y pues no tuve el corazón para botarla, ni las ganas de pelear para que negarlo.

Por eso ahora estoy corriendo para no llegar tarde al trabajo, que mi mejor amiga no me estrangule y mi jefe no me despida por llegar tarde por 5ª vez en la semana, no es que sea mi culp...¡MIERDA!

Ya fuiste de despistada otra vez

Esa es la voz de mi conciencia—no podía faltar— ignórenla siempre estará ahí fastidiando.

—Lo siento mucho, no me fije que estaba ahí— dije mirando hacia arriba para encontrarme con su cara— ¡Dios! eres muy alto.

—¿Gracias?— una voz ronca inundó en mis oídos.

— Mierda... lo dije en voz alta ¿verdad?— me pregunté a mi misma empezando a sentir vergüenza— bueno como dije lo siento y me tengo que ir— hablé antes de salir corriendo.

—¿No me vas a decir tu nombre al menos?— esa voz hizo que me detuviera nuevamente a mitad de mi camino.

—¿Y tú no me vas a decir el tuyo?— le devolví la pregunta

—¿En serio?— me miró fijamente esperando a que le respondiera, sin embargo no tenía idea de que quería que le diga— ¿No sabes quién soy?

—Por algo te estoy preguntando— apunte lo obvio— no tengo tiempo para esto— dije para mi misma viendo el reloj en mi muñeca.

—Soy Nicholas Pics

— Pues un gusto Nicholas Pics, yo soy Z...— pero antes de poder terminar mi móvil suena.

Nos estamos atrasando y nos van a jalar de las greñas mujer, apresúrate.

Conteste mi teléfono— ignorando a mi conciencia— aún con el hombre desconocido viéndome atentamente, supongo yo a qué espera responda su pregunta, sin embargo la que me llama es Elli— mi mejor amiga— por lo que le respondo sin siquiera pensarlo.

—¡¿DONDE ESTAS?!— separó un poco el móvil de mi oreja ante ese grito.

—Ya voy, estoy a una cuadra de cruzar el parque, no te preocup...

—¡¿QUE NO ME PREOCUPE?!

—Baja un poco el tono Elli— le digo porque estoy apunto de quedarme sorda.

Le doy la espalda al sujeto desconocido para prestar toda la atención a mi llamada.

—Lo siento, pero el jefe está por llegar y si no estás aquí en menos de 3 minutos te puedes considerar despedida Ze.

—Ahora llego, distrae al jefe voy a entrar por la puerta trasera.

Sabes que el Adonis sigue esperando ¿verdad?

Que Adon... a si ya lo vi. Me digo mentalmente girando y levantando mi vista hacia él.

—Te cuelgo Elli, ya voy— digo apartando la vista.

—Apresúrate

Esa es la última palabra que escucho antes de colgar y tratar de echarme a correr— y digo tratar porque alguien me llama nuevamente—.

—Todavía no me dices tu nombre— me dice el tal Nicholas. Sonrío y le digo:

—No le doy mi nombre a desconocidos.

Y de ahí me voy, dejándolo descolocado con mi respuesta y un poco extrañado porque al parecer él cree que yo se quién es.