Nicholas
2 años antes
Estoy sentado en el restaurant más fino de la ciudad, hace casi 1 año y medio que volví a la ciudad luego de ir a la universidad, fue una de las mejores épocas en mi vida o eso creí porque ahora estoy aquí, esperando a la mujer que ha despertado más que un simple deseo en mí.
Vanessa Wats es una chica que conocí de casualidad en un evento de la empresa familiar, no puedo decir que fue amor a primera vista, no que quede embobado por su belleza porque no creo que exista tal cosa, y de existir ninguna mujer podría ser lo suficientemente hermosa para mi como para que no reaccione, sin embargo aunque eso no sucedió con Vanessa puedo decir que su belleza fue un rasgo de ella que me capturó en un inicio, no es lo más hermoso que he visto pero si me cautivó.
Le pregunté a mi padre quién era y dijo que era hija de unos de sus socios más importantes y un amigo suyo de la universidad, me importo una mierda si es que eso fue una advertencia para que no me acercara porque de igual manera lo hice. Al parecer ella sí me conocía por lo que empezamos una conversación relajada entre nosotros, estuvimos juntos el resto de la noche. De vez en cuando se acercaba una que otra persona para saludarnos y nosotros respondimos con cortesía, bueno ella porque mi paciencia no está para soportar viejos hipócritas.
Creo que Vanessa se dio cuenta de mi reticencia por entablar conversación con personas ajenas a ella porque no dijo ni una palabra sobre mi comportamiento. Luego de unas horas que fueron aburridisimas me decidí en echar un polvo para relajarme. No conocía mucho a Vanessa por lo que la descarte de mis alternativas para una follada rápida en el baño del salón, cuando visualicé a una chica que me parecía vagamente conocida por la escuela y con la que no me había acostado nunca, me separé de la hija del amigo de mi padre para poder ir tras ella.
Cuando estaba intentando irme, Vanessa me agarra del brazo deteniendo mis movimientos, voltee a verla, para preguntar:
–¿Qué quieres?– regreso mi vista a la chica que antes había seleccionado
–¿A dónde vas?– la tonta pregunta de la pelirroja hace que voltee a ella nuevamente
–A echar un polvo– le digo sincero porque no tiene sentido mentirle ¿Por qué lo haría?
Hace una mueca
–¿Con quién?– inquiere
–Tengo poca paciencia– revelo– así que dime que quieres de una vez, porque no me gustan los rodeos
–Yo puedo ser ese polvo si quieres– me enfoco completamente en la ojiverde cuando suelta esas palabras
–¿Tú?– repito, porque no procesé del todo su petición
–No soy mojigata, puedo contigo– se pasa una mano por su cabello y yo entrecierro mis ojos
–¿Eres virgen?– pregunto directo
–No-o– miente
–No soy idiota– me impaciento– no necesito a alguien virgen, solo quiero un polvo para relajarme y tú no me sirves para eso ahora– me suelto de su agarre
Sé que estoy siendo un hijo de puta, sin embargo poco me importa porque no hay persona con la que me exprese con sutileza para no dañar los sentimientos o una mierda así.
–Puedo hacerlo– dice segura
–No te estoy obligando a nada– expreso
–Lo sé– carraspea– yo lo quiero

ESTÁS LEYENDO
Encontrados
RomanceNicholas Pics cree que todos lo conocen Zenda Rigther no lo conoce ¿Quedarán como desconocidos? ¿Se encontrarán? ¿Solo serán amigos? ¿Habrá algo más entre ellos? ****** -Apto para todo publico -Contiene lenguaje vulgar -Contenido +18 -Romance Es m...