Parte 26

657 53 0
                                    


Llego el día lunes otra vez la rutina, un día de mucha investigación e interrogatorios.
Por la tarde, antes de que MC se marche, Alan la increpo.


Alan: Hoy no te escapas, vamos al polígono de tiro.


MC: Pero Alan...


Alan: Hoy no hay peros señorita. Usted viene conmigo.


Resignada subió a su auto y fue a la clase obligada.
Una vez allí, Alan le explico cada punto para hacer un tiro perfecto, la manera en la que debe agarrar el arma, la posición de sus dedos, en cual de ellos tiene que ejercer la fuerza, cuales son los de apoyo, como posicionarse, su respiración, la mira.
Los primeros tiros fueron un desastre, Alan solo se reía. Lo hacía divertir la manera en que MC se fastidiaba.


MC: ¡Para! Ya no te rías, estoy tan enfadada. Es como si alguien allí detrás me moviera ese maldito cartel y no atinara ningún disparo.


Alan: Es que estas tensa. El miedo a tener que disparar te paraliza. Mejor tomemos un descanso, bebamos algo y seguimos.


MC: Esta bien. Descansemos un poco. Pero ahora no me iré si al menos no atino uno.


Alan asintió y le entrego una cerveza. MC negó con su cabeza.


MC: Hoy no. Quiero estar concentrada, no borracha.


Él asintió y le dio un refresco. En realidad no se trataba de borrachera, sino de su embarazo. Pero aun no quería contárselo a nadie, aunque eso sería un poco complicado.
Luego de volver a la prueba, un par de intentos mas y ya iba tomando el ritmo a como disparar. Obviamente, debería tomar mas clases, pero al menos era un buen comienzo. 

Duskwood, la vida después del final.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora