Duskwood, la vida después del final.

Parte 40

REACCIÓN INESPERADA

Habían pasado unos días de que MC les contó a sus amigos que estaba esperando un bebe con Jake.
La manera en la que se lo tomaron no fue lo que ella esperaba.
Se había ilusionado con que todos estuvieran felices y los felicitaran. En cambio, solo recibió hostilidad. La única que no le había dado la espalda era Cleo.
Pero aun faltaba una pieza en este puzzle, una a la que todavía no había querido enfrentarse.
No quería romperle el corazón, aunque a estas alturas sería inevitable.

Llegó de noche a casa, el trabajo de ese día había sido agotador.
Estaba en la puerta de su departamento abriendo la cerradura cuando alguien la tomó del hombro de imprevisto.
Cuando por fin pudo recomponerse, se dio cuenta de quien era.

Phil: ¡Oh lo siento! Solo soy yo. No quise asustarte, creí que me habías visto venir.

MC: No, no te había visto. Casi haces que me de un infarto.

Phil: No fue mi intención. Necesito decirte algo.

MC: El que...

Phil estaba nervioso, esto hacía que sus palabras salieran sin filtro.

Phil: No me importa nada, ni que esperes un hijo de él, ni que lo ames. Solo debes saber que aquí estoy para ti, como un amante, como un novio, un amigo, como lo que quieras, pero no me alejes de tu vida. Te necesito MC.

Ella lo observaba confundida.

MC: Phil, no puedo hacer esto. No quiero jugar contigo, no puedo prometerte algo que no va a pasar.

Phil: Por favor MC. Escúchame.

MC: Espera, entremos y hablemos dentro.

Lo hace ingresar y toman asiento.

Phil: Óyeme, me enamore de ti desde la primera vez que hablamos por teléfono. Eras distinta a los demás, mas madura, mas pensante. Me enamoro todo de ti, tu voz, tu inteligencia, tu humor, desde el comienzo sentí que podía confiar en ti. Por eso el día que me arrestaron te busque. Eras la única que podía demostrar mi inocencia, porque eres racional, no te rindes y siempre vas hasta el final.

MC lo miraba impresionada, no tenía ni idea de que él la viera de esa forma.

PHIL: Entraste en mi vida como un rayo de luz, la cambiaste todo por completo, me hiciste alguien diferente. Yo era un tipo malhumorado, frió, pero llegaste tu y me llenaste de ganas de vivir, de sonreír, de poder confiar en alguien por primera vez en mi vida. No te vayas dejándome a oscuras de nuevo, no dejes que me apague otra vez. Este mundo que me mostraste es verdaderamente hermoso, pero solo lo es si tu estas allí.
Por eso te pido que te quedes, de la manera que desees pero que sigas sosteniendo mi mano.
Mi vida fue una completa mierda siempre y ahora por primera vez siento que tengo ganas de vivirla, pero solo si tu me acompañas en el camino.

MC abrazó a Phil y él se quedo allí sin intenciones de soltarla.

MC: Phil aquí estoy, no me iré a ningún lado. Solo tenía miedo de decírtelo y que te enfadaras conmigo como lo hicieron los demás. También tenía miedo de perderte, eres muy importante para mi. Y aunque nuestros sentimientos no sean iguales, te quiero. No puedo prometerte un futuro como pareja, pero de todos modos estaré para ti siempre que me necesites.

Phil: ¿De verdad no te iras?

MC: De verdad, aquí estaré. Pero hay un problema ahora.

Phil: ¿Cuál es?

MC: Que por unos meses nada de alcohol. Deberás inventar un nuevo trago para mi.

Phil se ríe y a continuación toma la cara de MC entre sus manos.

Phil: Lo que me pidas lo tendrás. Un licuado de bananas, papas fritas, kebab o una sandía.

La suelta pero sin dejar de mirarla con los ojos llenos de amor.

MC: Gracias Phil. Es muy importante para mi poder contar contigo.

Phil: Bueno me voy. Te dejare descansar. Pero visítame en el Aurora.

MC: Iré, siempre que el trabajo me lo permita.

Phil: Le diré al jefe Bloomgate que te cuide y no te haga trabajar demasiado.

Se vuelven a abrazar y Phil se marcha. MC queda recostada en el sillón con una sonrisa en sus labios.