Parte 52

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INCERTIDUMBRE


Las horas pasaban y no todavía no había ninguna novedad sobre MC.

Tanto Alan como Jake estaban desesperados por encontrar una pista que los llevara a ella.

Jake había conseguido averiguar su ultima conexión pero esta había sido en el bar donde sabían que estuvo por ultima vez.

Atormentado y muerto de miedo fue hasta la casa de su hermana, la habitación del hotel lo sofocaba.

Llego a su puerta y un poco dudoso golpeo. No sabía a quién acudir.

Con sus únicos dos amigos no podía ir, ellos no entendían el amor que sentía por MC. Con los chicos no se llevaba bien, así que Lilly era su única opción plausible.

Era tarde por lo que Lilly se asusto al verlo allí.


Lilly: ¿Qué haces aquí? ¿No me digas que paso algo malo?


Jake: No, aun no hay novedades. Pero necesito un abrazo de hermana.



Esta se abalanzo sobre él y lo envolvió en sus brazos. Él comenzó a llorar en su hombro, estaba desbordado.

Lo hizo entrar y se sentaron en el sillón de la sala.



Lilly: La vamos a encontrar, no te rindas.


Jake: Sabes... el miedo a perderle es tan grande que siento que me estoy ahogando. No quiero ni imaginar lo que debe estar sintiendo, no pasa ni un solo minuto en el que no piense si esta bien, como estará nuestro bebe, si la estarán maltratando. Miles de escenarios se me cruzan por la cabeza. Hasta llegue a pensar que es tan terca que es capaz de enfrentarse a 10 tipos con una soga y solo sus manos.


Lilly: No creo que sea tan imprudente. Si, es una mujer muy valiente pero su bebe es lo mas importante de su mundo, junto contigo, así que no creo que sea arriesgue de tal manera de que sufra consecuencias.


Jake: Lilly ni siquiera sé si se esta alimentando. El no saber nada me esta volviendo loco. Ni siquiera soy capaz de pensar con claridad.


Lilly: Ven aquí, relájate un momento. Necesitamos tener  la cabeza despejada, de otro modo nuestra mente se nublara y nada bueno sale de allí.



Lilly lo acostó en el sillón dejando que apoye su cabeza en sus piernas. Mientras acariciaba su cabello, al rato Jake estaba adormecido.


Por otro lado, Alan estaba intentando observar las cámaras de seguridad de las calles. Hasta cierto punto el rastreo era posible pero luego le perdía el rastro.

Estaba en su oficina, sentado en la oscuridad. En su mente, repasaba una y otra vez como llego a su vida, cuando le dijo lo del embarazo y cada una de las charlas que habían tenido desde que se conocieron. Definitivamente, amaba a esa mujer aunque ese amor no era correspondido.

Después de tanto pensar se durmió en la silla.

Duskwood, la vida después del final.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora