Duskwood, la vida después del final.

Parte 193

HERIDAS ABIERTAS

Los niños y las chicas habían regresado de Sttugart, cuando Jake escucho el motor del auto apagarse salió en busca de los brazos protectores de MC.

Mientras Lilly entraba con Liam y los niños ingresaban las compras, Jake y MC se quedaron en silencio, de pie, solo sosteniéndose el uno al otro. Él sentía que sus brazos eran su hogar, era el único sitio donde se sentía en calma, donde con solo escucharla respirar todo volvía a estar en paz.  MC lo mantenía junto a su pecho, Lilly gesticulaba desde la sala de la casa.

Con sus gestos le indicaba que fueran a caminar por el bosque, ella se quedaría junto a los niños.

MC: Oye cariño, ¿Quieres que demos un paseo?

Jake: ¿Y los niños?

MC: Se quedaran con Lilly.

Jake: Bien, vamos.

MC: Deja que les avise, ya regreso.

Ella ingreso a la casa, les ordeno a los niños que se comportaran y que le hicieran caso a Lilly, que si necesitaban algo la llamaran a su móvil. 

De regreso junto a Jake, caminaron durante unos minutos hasta llegar a orillas del lago. Una vez allí se sentaron en el césped mientras el agua corría generando un clima cálido, el sol brillaba sobre esta y el canto de los pájaros ayudaba a calmar los nervios de él. Permanecieron unos minutos en silencio, MC reposaba la cabeza en el hombro de Jake y él en la suya.

Por momentos, él llevaba sus labios a su frente y la besaba, mientras con una de sus manos acariciaba y sujetaba la de ella. MC le daba su tiempo, no quería presionarlo para que hablara, él lo haría cuando lo creyera conveniente.

Segundos después comenzó a hablar sobre lo sucedido.

Jake: Hoy tuve la charla pendiente con mi padre.

MC: Lo sé.

Jake: ¿Cómo lo has sabido?

MC: Te escuche cuando hablabas con Liam, lo fui a buscar para bañarlo pero estaban teniendo una conversación de padre e hijo y no quise interrumpir.

Jake: Hubieses entrado cariño.

Jake hizo una breve pausa para luego continuar su discurso.

Jake: Bueno no tenía ganas de hacerlo, pero me prometí que no dejaría nada pendiente en mi vida. Quiero que al momento de casarme contigo, ningún resentimiento este alojado en mi, quiero ser un hombre libre, uno que ha roto las cadenas del pasado doloroso para construir un futuro feliz y hermoso contigo... con ustedes.

MC lo miraba con amor y orgullo, definitivamente Jake intentaba ser una mejor persona y ella podía verlo y estaría ahí a su lado para lo que fuera que necesitara.

Jake: He ido hasta su casa, me he parado en el frente y estuve como unos 20 minutos solo mirando. Tenía un nudo en la garganta, no podía tragar, me costaba respirar. Hubiese deseado que estuvieras allí tomando mi mano como ahora, tú logras calmarme, me haces sentir seguro, estas para sostenerme si caigo.

MC: ¿Por qué no esperaste a que volviera? Podríamos haber ido juntos.

Jake: Porque mas allá de sentir la necesidad de tenerte cerca, también creí que era algo que debía enfrentarlo solo. Así que estuve 20 minutos en su puerta sin hacer nada hasta que me vio por la ventana y salió. Las manos me sudaban y mi pulso estaba acelerado, me sentía como un niño pequeño y desprotegido. Se acerco a mí, quiso tocarme pero por impulso di un paso hacia atrás. Así que solo me miro y me invito a pasar, lo seguí mientras entraba. Atravesamos la puerta y me recibió su sala de estar, había un sillón negro a un lado, me senté allí y permanecí en silencio. Él comenzó la conversación.