Duskwood, la vida después del final.

Parte 177

ENFRENTAMIENTO

MC se aventuro en soledad hacía su destino, los chicos la secundaban desde el micrófono.

Al final, había decidido ponerlo en la chaqueta porque el roce de las prendas hacía interferencia. Puso la llave sobre el tambor y en el primer intento el motor arranco. 

Al salir del bosque, Phil volvió a cruzarla pero esta simplemente no lo vio. Hizo una pequeña parada en una gasolinera para llenar el tanque y se puso en marcha hacía Colonia.

Cuatrocientos sesenta y ocho kilómetros la separaban de su ubicación, en casi 5 horas podría estar allí. MC hizo una breve parada casi llegando, en un KFC para comprar pollo frito, no quería perder ni un solo minuto mientras conducía por lo que fue comiendo en su auto.

Una vez allí en la 51 y Sudebrucke una nueva indicación la esperaba, miro hacia todos lados y no veía a nadie. Phil se mantenía a una distancia prudencial, no le había perdido pisada nunca. Mientras él se había comunicado con Alán que le pedía indicación de que era lo que estaba ocurriendo y por donde se dirigían para que el FBI estuviese cerca en caso de que fuera necesaria una intervención, Jake y el resto del equipo iba con el resto. Hacía 3 horas que había pisado suelo alemán. MC les hablaba por el micrófono mientras miraba en todas las direcciones.

MC: Aquí no hay nada, estoy debajo de un puente que cruza con la 51 no hay signos de Robert, ni Alice, ni ninguno de sus hombres. Iré a revisar el área.

Eric: Bien, pero ten mucho cuidado.

MC: Lo haré.

En dirección al sur había un parque, se veía con su césped como recién cortado pero ninguna persona en su interior, circulación de transito normal, una gran escuela técnica y hacía el norte el río Rin y las vías del tren. Mientras permaneció sobre la costanera, un niño de unos trece años se acerco a ella y le entrego un papel. Sin mediar palabra dio media vuelta y se marcho. Con la hoja en su mano comenzó a leer.

Robert: Eres una buena chica pero no es aquí donde te veré, pon la ubicación en el gps. Te veré en el Neuland Park de Leverkusen. Sigue mis órdenes y todo saldrá bien.

A esas alturas MC se estaba cansando de los jueguitos de Rob pero no tenía otra opción que continuar con su locura. Había manejado por más de 400 kilómetros, no era momento de rendirse. Caminando nuevamente hacía su vehículo, volvió a hablar con el equipo.

MC: No está aquí, un niño se acerco a mí y me dio un papel. Al parecer el chico sabía quién era yo, ha cambiado el lugar de entrega. Ahora me espera en el Park Neuland. Debo esperarlo en la banca que esta frente a los mástiles.

Eric: No me gusta nada estos cambios repentinos. ¿Y si es una trampa?

MC: Es lo que he esperado todo este tiempo. No te preocupes por mí, estaré bien.

MC subió a su auto, lo puso en marcha y se condujo 22 kilómetros más hasta el parque.

Una vez allí caminó hasta el punto fijado, 10 minutos de espera y nada, 15 minutos y seguía esperando, 20 minutos después alguien apoyo su mano en su hombro. Robert en persona y frente a sus ojos, como la última vez pero esta vez eran solo ellos cara a cara.

Robert: MC querida, creí que no acatarías mi orden y que estarías con todo tu equipo aquí.