Duskwood, la vida después del final.

Parte 199

LA BODA

Llego el día tan esperado, donde Jake y MC jurarían a dios su amor eterno.

Suena como algo anticuado porque hoy muchos ya no creen esas cosas y en cierto modo ellos tampoco, no al menos en la iglesia como institución pero si en que él los bendijera para tener una vida feliz juntos.

Esa mañana se encontraban solos, MC dormía en los brazos de Jake, él la tenía aferrada a su pecho, era como si quisiera meterla dentro de él... en su corazón. Los niños estaban con Nathan, esto les había dado un poco de paz. De no ser así seguramente desde temprano los tendrían saltando en su cama, ansiosos. MC abrió sus ojos y se encontró con los brazos fuertes de Jake rodeándola. Intento deslizarse lentamente pero solo hizo que se despertara.

Jake: ¿A dónde vas?

MC: Solo quería ir a preparar el desayuno.

Jake: No, quédate aquí un rato más. ¿Sabes cuánto tiempo hace que no podemos estar así? Me refiero a abrazados en la cama y durmiendo juntos sin que nos molesten. Por favor, quédate un ratito más y disfrutemos de este momento de soledad.

MC: Bien, pero solo 15 minutos.

Jake: Bien, me conformare con eso.

Mientras permanecían en la cama disfrutando, Jake besaba su frente aun algo dormido. Diez minutos después el teléfono de Jake comenzó a sonar cortando ese hermoso momento que estaban teniendo.

MC: Bueno creo que se termino el recreo. Atiende que tal vez puede ser tu padre, mientras aprovechare y tomare una ducha.

Ella se levanto, tomo una toalla limpia, su bata y se dirigió al baño. Jake tanteo sobre mesa de luz intentando tomar su móvil pero este se cayó y la llamada finalizo.

Jake: ¡Mierda!

El teléfono comenzó a sonar nuevamente, esta vez contesto.

Jake: Hola. ¿Quién es?

Alex: ¡Hey amigo! ¿No me digas que te he despertado?

Jake: Un poco, pero no importa. ¿Cómo estás?

Alex: Bien, llamaba para avisarte que estamos en Duskwood. Hemos llegado en la madrugada, estamos en el hotel del pueblo.

Jake: Genial, MC estará tan feliz como yo de que haya podido asistir.

Alex: Claro, no nos lo perderíamos.

Jake: Bien, habla con Alan y que más tarde los lleve a casa de mi padre. Nos vemos allí.

Alex: Entendido, además hay cosas de las que tenemos que conversar.

Finalizó la llamada, se levantó de la cama y entró al baño donde MC se duchaba. El vapor con olor a flores lo recibió, ella estaba de espaldas a la puerta. El agua se deslizaba por su espalda adolorida, la tensión de estos días había hecho estragos en sus músculos. 

Jake dejo caer sus bóxers y lentamente abrió la puerta para ingresar donde ella estaba. La tomo por la espalda, deslizando sus manos hacía sus pechos. Sus labios succionaban su cuello, sus pezones se endurecían con su tacto y su erección crecía cada vez más. MC dejo salir un gemido, su cuerpo respondía con éxito a las acciones de Jake. El calor se extendía y sus piernas se empapaban con sus jugos.