Jake se alegraba de recibir la visita de uno de los chicos.
Hubiera mentido de haber dicho que no había esperado el mínimo intento de acercamiento por parte de Will: un mensaje, una visita, una llamada... Pero no había existido nada de eso. No sabía cómo se sentía con respecto a eso. ¿Aliviado, quizá? Aunque, en el fondo, también algo apenado.
En su lugar, había sido Nick quien finalmente fue a verlo a casa de su madre. Se alegró de que así fuera. Las cosas serían más tranquilas con Nick que con ningún otro chico. Lo invitó a pasar a su dormitorio y los dos chicos se sentaron a conversar en la antigua cama de Jake.
—¿Cómo estás? —Fue lo que le preguntó Nick.
Jake se encogió de hombros.
—Bien. Bueno.
—¿Bien? —Nick hizo una mueca irónica.
Jake lo miró a los ojos, como analizando hasta qué punto podía confiar en él. Antes, cuando empezaron a convivir, Nick y él no habían sido digamos que los mejores amigos. Eran algo distantes el uno con el otro, e incluso habían existidos ciertos roces negativos. Pero desde hacía un tiempo, se habían unido bastante más, en realidad.
Jake tragó saliva antes de volver a hablar.
—No lo sé —confesó.
En realidad, no estaba nada bien. No paraba de pensar. Pensaba en el divorcio de sus madres, en su pasado, en su presente, en su futuro, en cada una de las palabras que Matt le había dicho, en sus deseos. En Will. Joder, pensaba en Will. ¿Por qué en Will?
Pero lo peor de todo no era lo que pensaba, era lo que sentía. Se sentía solo. Más solo de lo que había estado nunca. Jake siempre había tenido muchos amigos con los que salir, conversar de tonterías y echarse unas risas. Pero, ¿cuántos amigos de verdad había tenido a lo largo de su vida? ¿Cuántas personas habrían venido a verlo como acababa de hacer Nick?
Los echaba de menos, a todos. Echaba mucho de menos a sus nuevos amigos.
—Puedes contarme lo que quieras, Jake.
Jake supo que era cierto. Sintió que lo era, que tenía alguien con quien hablar. Quizá incluso podía contarle lo que no le había contado a nadie.
—Quiero volver a estar con vosotros, en casa —su voz tembló un poco al decirlo.
Nick se acercó, posó una mano en la nuca del pelirrojo.
—Pues hazlo, vuelve. No tienes por qué seguir aquí.
Jake sacudió la cabeza.
—No creo que deba volver.
—¿Por qué?
—Porque yo no soy como vosotros. No encajo con vosotros.
Nick respiró profundamente. Se apartó un poco de él, y a Jake le pesó esa falta de contacto.
—¿A qué te refieres?
—A que yo no... sé vivir como vosotros. No sé hacer que no me importen las cosas que hacemos, que no me pesen.
—Jake, sé de lo que hablas —soltó una risa irónica—. Yo también he sido supuestamente hetero hasta hace poco, ¿lo has olvidado?
—No me refiero a eso. No lo entiendes.
—Pues entonces explícamelo.
Jake cerró los ojos, tragó saliva y soltó las palabras que llevaba ocultando mucho tiempo.
—Mataron a alguien. A alguien a quien tenía mucho cariño.
No volvió a abrir los ojos. Escuchó a Nick moverse en la cama suavemente, y luego habló.
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Juego de Chicos (+18)
RomanceLo único que Nick, Gabriel, Will, Jake y Matt tienen en común es que convivirán en su nueva casa de estudiantes durante todo un curso. Eso, y que los cinco han aceptado entrar en el juego que Matt les ha propuesto. Las normas son sencillas: -Nadie p...