Juego de Chicos (+18)

El primer perdedor

En un primer momento, Jake optó por cerrar los ojos para concentrarse.

No era, en realidad, la primera vez que se masturbaba con otros chicos. Ya lo hizo una vez con dos amigos, aunque la diferencia era que entonces no había ninguna prueba absurda que cumplir si quedabas el último. Esa vez, Jake quería asegurarse de no ser quien terminase bebiendo del vaso.

Tenía su gracia, en realidad. Al menos, era excitantemente emocionante tener un castigo como ese de por medio. Jake no estaba del todo convencido de que no quedaría el último. ¿No era de sentido común que terminasen antes a los que le gustaban los chicos? Si él estuviese jugando a algo como eso rodeado de chicas... Entonces sí que terminaría el primero.

Pero allí, de pie, con los ojos cerrados y oyendo solo el sonido de las respiraciones de los otros chicos acompañado por la fricción que ejercían sobre su cuerpo... Era difícil concentrarse. Así que abandonó la idea de ganar usando su imaginación y abrió los ojos.

Todos, excepto Nick, permanecían con los ojos abiertos. Ninguno se había acercado al círculo aún, por lo que Jake se sintió con esperanzas a pesar de no estar cerca todavía del orgasmo. Pasó la mirada por los chicos que estaban con los ojos abiertos, quienes también miraban al resto en busca de contacto visual. Matt le sonrió, aunque el resto permaneció como si nada.

Después de aproximadamente un minuto, Nick fue el primero en dar un paso hacia delante y posicionarse en cuclillas. Fue entonces cuando abrió los ojos, aunque no miró a ningún otro chico, sino al vaso donde estaba apuntando.

Justo seguido por él, Gabriel avanzó hacia delante y se posicionó junto a su hermano. ¿Eran iguales incluso para eso? Jake sonrió al pensarlo.

Se corrieron prácticamente en el mismo segundo. Los gemelos comenzaron a llenar el vaso mientras sus gemidos se incrementaban. Jake contempló cómo lo hacían. Tenía que reconocer que incluso tenía su morbo, en realidad.

Escurrieron las últimas gotas y, al terminar, Nick sacudió el pelo de su hermano con la mano que tenía limpia en señal de cariño. Era jodidamente raro, en realidad. Pero aun así, seguía teniendo su gracia.

Jake contempló el vaso una vez los dos se hubieron levantado. Joder, lo habían dejado jodidamente sucio, y solo llevaban dos corridas. Jake aceleró su ritmo, buscando adelantar su orgasmo.

Echó otro vistazo a los dos chicos que quedaban. Primero a Matt, que parecía altamente concentrado. Se estaba mordiendo los labios con fuerza, lo que hizo creer a Jake que quizá no tardaría mucho en terminar.

Después miró a Will. Will lo estaba mirando mientras se masturbaba. Jake le dedicó una mueca. Estaba bastante convencido de que Will sentía atracción por él. Y que se muriera allí mismo si tener al gay del grupo babeando por él no le ponía caliente.

Will no le devolvió la mueca. Al contrario, su rostro pareció enfurecerse. Eso divirtió a Jake todavía más. El chico pensó que le gustaría que fuera Will quien quedase el último para verlo beber del vaso.

Solo apartó la vista de su compañero cuando Matt dio un paso delante para clavar sus rodillas en el suelo, frente al vaso. Inundó el interior del mismo con una cantidad de semen considerable mientras se llevaba la otra mano al cuello. Jake observó el detalle de cómo los glúteos del chico se contrarían mientras se corrían. Matt sí que estaba jodidamente en forma. El cabrón podría tumbar a cualquiera del grupo de un golpe si quisiera.

Solo quedaban Will y él, lo que logró poner a Jake nervioso. No podía perder en eso, menos aún contra Will.

Matt se levantó al terminar y se acercó a Will.