47. El Poder de las Palabras.

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(Maratón 3/6)

Lacey.

Una frase puede cambiarte la vida, una palabra puede reconstruírtela, una oración te puede mover el mundo y una proposición ser el centro de tu universo.- Lacey Flores.

El auto se detuvo, las luces iluminando la vieja cerca que cubría los alrededores de la cancha de futbol, abrí la puerta para salir del vehículo y en cuanto mis pies estuvieron sobre el asfalto sonreí.

Las noches cálidas del entrante verano me permitían salir mucho más cómoda, cerré la puerta del Jeep y para luego comenzar a recogerme el cabello en una coleta, segundos después el sonido de dos autos más llegando me hizo girarme a ver. Damien bajo del auto llegando a mi lado con las tenazas en mano, la última vez que habíamos venido aquí casi nos descubren cosa por la cual habían mejorado la seguridad del
plantel.

- Este será el mejor recuerdo que tenga de la secundaria. – hablo Paul saliendo de su auto con Jade tras él. – Vandalismo a Ray Deverson.

- No es vandalismo. – dije cruzándome de brazos.

- Si, bueno. – espeto Gina cerrando la puerta del copiloto del auto de Cris. – Saltar una cerca para entrar a un lugar ilegalmente no es una obra de caridad precisamente.

La puerta del asiento trasero del Jeep fue abierta justo que en el momento que Cris salía de su auto. – Deja de quitarle la emoción a esto, Flores. – Dina salto del interior del auto. – Yo solo quiero que este año termine para que Morris me deje la vida en paz.

Damien y yo compartimos miradas, juro que les contaríamos a los chicos esa horrible anécdota en otro momento, pero era hora de saltar la cerca. Le hice un ademán a los demás para que me siguieran, escale la cerca para saltar y cuando caí del otro lado mi corazón comenzó a latir rápido, reconocí la adrenalina en seguida.

En cuanto los chicos estuvieron de este lado corrimos por la oscura cancha de soccer, Gina debido a los nervios soltaba risitas ahogadas y todos les soltábamos un ¡Sssh! para que hiciera silencio, el guardia de seguridad debía estar rondando cerca.

Al llegar a la puerta que estaba cerrada desde afuera con candado, Damien lo cortó con la tenaza y entramos en silencio, nuestros pasos comenzaron a hacer eco por los
desolados pasillos de la secundaria, la cantidad de recuerdos vividos en estas instalaciones me llego de forma nostálgica.

- ¿Cuándo nos dirán que hacemos aquí? – siseo Cris corriendo agarrado de mano con mi mejor amiga.

- ¿Que parte de sorpresa no entienden? – masculle comenzándome a sentirme cansada
debido al esfuerzo físico.

Al subir las escaleras mis piernas comenzaron a arder, aun así no me permití detenerme, entramos en la biblioteca donde Paul, Jade y Dina comenzaron a quejarse porque no les dejábamos descansó.

- ¡Por Dios! – me reí trotando a las escaleras. – Y la floja aquí soy yo.

Cuando entramos a la sección que meses atrás Damien y yo habíamos recorrido, losrecuerdos de como hace un año había irrumpido aquí con mis hermanos y sus amigos me llenaron el alma, decidí que era momento para descansar.

- ¿Y más o menos que es esto? – me pregunto Jade señalando a los estantes.

- Es una tradición que Logan creo hace un año. – mi novio le hizo un ademán a mis amigos para que les ayudasen a mover el estante. – La llamo la dinastía Flores.

Más allá del Comienzo. ✓[#1 Saga Del Comienzo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora