Capítulo 29

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ANTON

Dos días pasaron después del encuentro sexual que tuvimos Rachel y desde ese momento, no pude olvidar lo que había pasado.
Estaba empezando a sentir ganas de volver a tenerla cerca de mí, de volver a sentir su aliento acariciarme el oído y de volver a escuchar sus gemidos.
Eran tantas cosas que me había provocado y eso que solo habíamos follado una noche.

Brandon: — ¿Estás ahí?

— ¿Eh? ¿A qué hora llegaste?

Brandon: — Hace un rato. Te estaba contando lo que me pasó ayer, pero parece que no me prestaste atención.
¿En qué estabas pensando?

En ese momento, Rachel bajó las escaleras y se dirigió a la cocina para tomar una botella de agua del refrigerador. Cuando notó que Brandon y yo estábamos en la sala, sus ojos se encontraron con los míos y casi escupió el agua que acababa de beber.

Brandon: — ¡Rachel! ¿Cómo estás?

Rachel: — Bien, ¿y tú?

Brandon: — Bien. ¿Y la niña? ¿Dónde está?

Rachel: — Arriba, está durmiendo. Si quieres, puedes subir a verla

Brandon: — Me encantaría

— No, porque ya te vas — interrumpí, y él me miró molesto.

Brandon: — Está bien, será otro día. Un placer verte de nuevo, Rachel. Dale un beso de mi parte a la pequeña — dijo sonriendo, y ella le devolvió el gesto. Movió su cabello a un lado y dejó a la vista su cuello.
Luego, Rachel se dio la vuelta y subió lentamente las escaleras, dejando ver sus piernas y su trasero mientras caminaba con la intención de llamar mi atención y lo logró, ya que andaba puesto un short corto con el que se veía perfectamente.

Brandon: — ¿Qué te pasa?

— ¿Por qué?

Brandon: — ¿No puedo subir a ver a mi sobrina?

— No es por ella que lo he dicho
— respondí pasándome las manos por el cabello, quitando de mi mente las ganas que me dieron de ir tras ella y llevarla a mi habitación.
Y es que ella tenía mucha facilidad para excitarme, con poco ya había conseguido que quisiera coger.

Brandon: — ¿Entonces? ¡Ah!
¿Es por Rachel? ¿O sea que ya…?
Es que te lo dije, estaba más que claro que esto sucedería. Además, vosotros dos sois tal para cual y no solo yo lo he notado, también Julia.
Hasta parecéis una pareja porque a veces andáis enojados, otros días felices y ahora hasta cogéis todos los días, ¿qué más falta?

— Para tu información no somos pareja ni cogemos todos los días

Brandon: — Pero si ya lo habéis hecho una vez quiere decir que no será la última, ¿o sí?

En tanto, no respondí a su pregunta y solo tomé un trago de mi vaso con agua.

Brandon: — Por tu manera de verle supongo que no.
Bueno, yo me tengo que ir.
Después te envío lo del avance del libro

— Okay

Brandon: — Si fuera yo se lo diría, le diría lo que siento por ella.
Tú deberías hacer lo mismo

— ¿Estás loco?

Brandon: — No es mala idea

— ¿Tú piensas que le gusto?

Brandon: — No sé mucho de mujeres, pero apuesto a que sí.
Hazlo, invítala a salir

— No

Brandon: — Pues es una buena idea.
Así te sacas de dudas

Señor Harris, Usted Es Mi ObsesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora