Señor Harris, Usted Es Mi Obsesión

Capítulo extra 18

RACHEL

Sábado, 18:04 pm.

El esperado fin de semana finalmente había llegado, y con él, la celebracion del logro de Dany y Rachel, quienes habían superado con éxito el examen de acceso a la universidad.

Anton y yo nos habíamos esforzado en preparar una cena especial y habíamos decorado el patio con luces que iluminaban el lugar para crear un ambiente cálido y acogedor.
Además, no solamente habíamos invitado a Dany a la celebración, sino también a Marie y Carl, sus padres. Con quienes no teníamos una relación muy cercana a pesar de que Dany y mi hija se conocieran desde hace tiempo. Y no era por ningún problema, simplemente porque no habíamos tenido el interés por conocernos bien a fondo.

El anochecer avanzaba lentamente, y la emoción en el aire era palpable, pues todos estábamos disfrutando y compartiendo risas, anécdotas.

Rachel: — Antes de empezar a cenar, quisiera brindar por este momento y por los chicos también

Marie: — Brindemos — dijo, levantando su copa de vino.

Carl: — ¡Por los chicos!

Anton: — Por los chicos

Marie, Carl, Anton y yo, levantamos nuestras copas de vino al aire para hacer un brindis en honor a Dany y Rachel, reconociendo su dedicación y esfuerzo en esta etapa de sus vidas que estaba a punto de iniciar. Incluso los chicos, que no bebían alcohol, levantaron sus copas llenas de vino para brindar, ya que considerábamos que brindar con agua traía mala suerte.

Rachel (hija): — Gracias por estar todos ustedes aquí y gracias por esta noche tan bonita — dijo, después de tomar un trago de su copa.

Anton: — ¿Y de qué es tu trabajo, Carl?

Carl: — Soy contador

— Qué interesante

Carl: — Sí, ya llevo más de cinco años en este campo

— ¿Y tú, Marie, me parece que Dany dijo que eras profesora de matemáticas?

Marie: — Sí

Carl: — Por algo le pedí matrimonio hace veinticinco, porque le gustan los cálculos y números — comentó, con un toque de afecto y haciendo que su mujer se sonrojara.

Marie: — Pues sí. No podía dejar pasar ese partidario — comentó y nos hizo sonreír a Anton y a mí.
— Yo trabajo en la escuela que está pasando por el hospital

— ¡Ah! ¿La que está en frente a un pequeño parque?

Marie: — Sí

— Yo trabajo en la tienda que está en la esquina

Marie: — ¡Oh, ¿en serio?! Sé dónde es.
De hecho, hace poco le mencioné a Carl que quería visitar esa tienda porque vi un vestido muy bonito en el escaparate

— Pues, cuando quieras, siéntete libre de pasarte

Marie: — Me encantaría

Carl: — Por cierto, ¿les gusta hacer caminatas por la naturaleza?

— Sí, aunque hace tiempo que no lo hacemos

Carl: — Menciono esto porque Marie, Dany y yo vamos cada mes a hacer una caminata a una montaña

— Suena genial

Dany: — La última vez fuimos a una montaña bastante alta, pero no llegamos a la cima porque ya llevábamos tres horas caminando y aún nos quedaba un largo trecho por recorrer