santísimo rosario

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En la escuela a la que yo iba con facu había mucha droga. Pero mis compañeros eran comprensivos y no me daban ni un gramo de marihuana.  Me ayudaban en mi recuperación, me protegían de los alumnos que me mal trataban. Yo los amaba,  amaba esa escuela.

Un día mi mamá se sentó junto a mi con dos hojas de papel. Una, era la inscripción para volver a mi escuela.  La otra una nueva  inscripción para una puta escuela católica.

Ella tomó mi mano y me dijo:
"Acá te muestro dos oportunidades.  Una es seguir con lo mismo de siempre.  La otra es cambiar a algo nuevo,  algo especial"

Si yo le llegaba a decir que quería seguir en mi escuela con mis amigos, me iba a dar un sermón y me enviaría a la escuela católica.  En realidad no me estaba dando opciones,  me estaba manipulando para que elija lo que ella quería. Le dije que iría a la nueva escuela y se puso muy feliz.

Me compré el uniforme (pollera,  medias largas, zapatos negros y una remera blanca) y me puse en marcha sin ánimos al primer día de clases.

En la escuela, mis papás,  avisaron que yo tenía ataques de pánico, de ansiedad, de nervios y el certificado de discapacidad por el borderline.  ¿a la dirección le importó? Obviamente no.

Me ponían media falta cuando me iba del salón para tener mi ataque. Me llamaban:

"Enferma"
"Discapacitada"
"Violenta"
"Drogadicta"

Era un infierno.  Menos mal que creían en la palabra de dios...

Mi papá debía retirarme antes de la escuela siempre, por mis ataques, ataques que me provocaban mis compañeros a  propósito diciendome:

"Seguro te violaron por puta y por eso tan trastornada"

Decidí hacer algo productivo en la escuela y me uní al centro de estudiantes donde tuve que confesarme con una monja antes de entrar. Obviamente no le conté nada de mi vida, le dije que le había gritado a mi mamá o algo por el estilo.

Con el centro de estudiantes organizamos una dormida en la escuela,  para conocernos mejor y divertirnos. Me pareció una idea buenísima ya que en ese centro no había nadie de mi curso y eran buenos chicos/as nunca me mal trataron.

Lo que no entiendo y nunca voy a comprender es por qué estando en 4to año de secundaria, con 17 y 18 años, los idiotas de mi curso sean tan idiotas (y no hablo en pasado porque lo siguen siendo)

Me estaba alistando para ir a la dormida organizada por el centro hasta que mi mamá recibió un llamado. Un maldito llamado. Llamado de la mismísima directora de la escuela.  ¿Qué quería? Avisar que yo no podía ir a la dormida por mi "discapacidad" lo tomé como discriminación. Me indignó,  me dolió,  yo ya estaba lista pata ir pero la vieja idiota (que a demás es profesora de psicología) Mr arruinó todo.

Un dia hable con mis papás y les dije que ya no podía ir a la escuela.  Me daba pánico. Veía la entrada y me recorría una sensación de miedo y ansiedad que lo sentía en todo el cuerpo. Sentía que me hundía en el mar, que las olas me ahogaban y no me dejaban respirar. Así que hablaron con la directora y le dijeron que yo iba a estudiar desde mi casa y rendiría los exámenes de manera presencial en la escuela. 

A la dirección no le gustó ni mierda y me daban cosas más difíciles que al resto a propósito. No me querían en esa escuela,  me querían echar indirectamente

Un día, la directora y profesora de psicología me dijo que vaya a hacerle preguntas y sacarme dudas de la materia.  hice una lista de las cosas que no entendía y fui a la escuela (cosa difícil)

Al llegar a la escuela yo comencé con mi primer pregunta, a lo que la directora me respondió:

"¿Que carajos me haces preguntas? Esto es un examen"

Le explique que no era lo acordado y me dijo que llamaría a mi papá para quejarse. Ella le dijo delante mío:

"Tu hija es una abusadora. Le damos la oportunidad de estudiar desde casa y no es capaz de estudiar para un examen"

Mi papá también le explicó que lo acordado era quitarme dudas pero la directora no aflojaba la cuerda. ¿Y mi papá? Callado sin defenderme de todas las cosas horribles que decía esa mujer de mi. Sentía impotencia,  ganas de gritar y arrancarme todos los pelos, pero me quedé callado, con la ilusión de que mi papá abra la maldita boca. (No lo hizo)

Volvi a casa casi llorando y gracias a las energías del universo me sacaron de esa escuela. 

Mi historia no termina acá...

Borderline (I don't eat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora