Ella O Yo

15 1 0
                                    

Después de todo mi lío en ese trabajo de mierda, pensé en mudarme con mi novio a casa de mi primo. Vivía con mis papás solo para estar cerca de mi trabajo pero Ya no lo soportaba más. El ruido, las personas. Necesitaba la paz de un pueblo.

Le comenté a noah la noticia. Al fin viviríamos juntos otra vez.
Juntos...
Eso es algo que siempre necesité y al fin encontré.

Sólo había un pequeño problema que se iba a interponer entre una vida sana, mi novio y yo: mi anorexia.

Lo peor de todo, es que nunca fue un problema para mi (ni lo es ahora)

* Juro por la vida de mis gatos.

* juro por la vida de mis hermanes.

* juro por mi amor hacia noah.

Qué yo intento verlo como una enfermedad. Pero no puedo. Es un estilo de vida. Es mi forma de vivir. Es como aprendí a vivir.

Se preguntaran: ¿por qué mi anorexia sería prejudicial en mi relación con noah?
La respuesta es: nunca había tenido una recaída tan fuerte.

No me importaba mi vida. Prefería estar enterrada tres metros bajo tierra con tal de ser flaca.

Pensaba que morir de anorexia era una muerte más que honorable.

Pensaba que estar postrada en una cama por ser piel y huesos era ser la perfección encarnada pero sin carne ni grasa.

Comencé a morir lentamente de hambre, pero no del todo, no. Me tenía a mi para alimentarme. Me estaba comiendo lentamente.
Pero...

¿Realmente Yo me estaba comiendo a mi misma ? ¿O era mi anorexia que me estaba comiendo sigilosamente?

Nunca lo sabré ya qué no me interesa. Solo quiero perfección.

Después de la mudanza, comencé a pesarme todos los días de forma compulsiva. Ver como los números de la balanza bajando día a día era como una droga difícil de dejar.

Los ayunos cada vez eran más largos. Si 20 horas se sentían como veinte minutos ¿por que no ayunar 24 horas? Y si un día entero se siente como medio día sin comer ¿por que no aumentarlo a dos días?
De esa manera, encontré otra adicción.

Al ayunar tanto y tan fácilmente, mi estómago se cerró pero mi novio no lo podía comprender. Me hacia comer como una persona normal y yo no lo era. Yo era superior.
Un plato de comida normal, era lo mismo que diez kilos de fideos para mi estómago, por ende, me caía pesado y vomitaba una o dos veces, hasta que descubrí algo :

Los dos o tres primeros vómitos salían solos. Los otros, si respiraba y relajaba mi estómago, podía controlarlos, pero si yo tensaba el mismo y hacia fuerza, podía vomitarlo todo sin necesidad de purgarme.
¿Qué encontré? Otra adicción.
Como es un musculo, después de entrenarlo, ya lo podía hacer después de comer solo una simple uva.

La respuesta es si:

* no me importaba si noah me pedía con lágrimas en los ojos que parara.

* no me importaba que mi hermano de diez años me pregunte: "¿Te vas a morir?"

* no me importaba qué mi hermana me imitara.

Yo solo necesitaba ser perfecta.

Cuando llegué a mis 50 kilos y a un índice de masa corporal de 20.0 decidí volver a estudiar danza. No me sentía bien con mi cuerpo pero pensé en inscribirme para quemar más calorías ya qué yo sólo caminaba 7km diarios.

Me inscribí en un estudio de danza al qué iba mi amiga Abigail. Era un estudio para principiantes pero servía para mi objetivo.

Asistía a muchas clases todos los días :

* contorcionismo

* gimnasia localizada

* Twerk

* femme style dance

* pole dance

No era fan de ninguna disciplina pero ayudaba a bajar.

Mi profesora tenía una balanza en su baño y por algún motivo, me gustaba pesarme antes y después de cada clase (obviamente, asistía en ayuno)

Con el pasar de los meses mis compañeras empezaron a notar mi cambio brusco de peso y, sobre todo Abi, se preocupó por mi.

No encontré otra alternativa qué decirle la verdad a mi amiga pero sabía que si le decía toda la verdad, ella se asustaría así que la partí en mil pedazos, tomé lo que ella necesitaba saber, omití fragmentos y escupí.

Fingí estar triste, enfermo, preocupado y con intención de recuperarme de un problema.
Ella, con sus mejores intenciones, dijo que me ayudaría. Como buena amiga lo intentó aunque yo construí un muro de adamantio que ella no pudo destruir.

Tres meses después, logré pesar 40 kilos con un índice de masa corporal de 16.0
Me sentía hermosa pero no perfecta.

Al fin podía salir a discotecas para bailar con mi amiga.

Al fin la gente me miraba

Al fin la gente notaba que yo tenía anorexia.

Estaba cerca de la meta final, pero me alejaron. Mi hermoso mundo color pastel estaba a punto de venirse abajo...

Borderline (I don't eat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora