The Sins Of The Father

CAPÍTULO 36: El fin.

"¿En serio? ¿Qué diablos está haciendo Zee?

Nu New era un idiota por olvidarse de esa serpiente que se confabulaba por más de un minuto.

"Maldito Saint."

Cuando se acercó a los dos, el ex-esclavo lo mira a los ojos con una sutil sonrisa maliciosa en su rostro. Dejando todo tipo de sentimientos desagradables en su cuerpo. Saint parecía demasiado presumido sentado a lado de Zee y lo detestaba.

Se detuvo a un pie del sofá, cruzando los brazos enojados mientras mira al señor del crimen que intenta descaradamente ignorarlo. Todavía está enojado, pero esto no es excusa para su comportamiento infantil.

—Zee, nececito hablar contigo. —Dijo sin apartar la vista de Saint. —Solos. —Enfatiza.
—Aaah... es el pequeño juguete más nuevo que has estado llevándote a todas partes en mi lugar, ¿eh? —Habla Saint. —¿Eh, bebé? Cuando Zee se aleja de su toque no tan sutilmente, le da algo de consuelo a Nu New. —Mira, puedes...
—Estoy hablando con Zee, no contigo. —Nu New la interrumpe bruscamente. Ella inhala profundamente, entrecerrando los ojos. El señor del crimen se gira para observar al más joven. Ambos tienen un desafío de mirarse finamente, intensificándose mientras más tiempo se fulminaban con la mirada.

Toma una una profunda inhalación, inclinándose hacía adelante para arrojar su vaso de whisky  sobre la mesa antes de volver a su posición original. —Despejen la habitación. —Ordena, atrayendo la atención de todos. Saint inclina su cuello hacía él con incredulidad.

—Bebé...
—Dije que despejen la habitación.

Todos entran en acción a su orden, los miembros de la familia arrastrando a los esclavos mientras huyen. Saint fue terco, se negaba a irse hasta que alguien lo agarró por el brazo y lo arrastró fuera.

Mantuvieron sus ojos fijos el uno sobre el otro mientras que los sonidos de los zapatos rechinaban contra el piso la partida de todos. Cuando la habitación quedó en silencio, todavía no hablaron. Nu New estaba planeando en su cabeza maneras de asesinarlo y Zee estaba pasivo como siempre.

—Que inmaduro. —Espeta. —¿Qué? ¿Ibas a dormir con él porque Perth y yo te pusimos celoso? —Zee se encoge de hombros.
—Lo que es más inmaduro es actuar como un mocoso a propósito para tratar de hacer que la gente se ponga celosa. —"Vale, touche. Ambos somos unos mocosos inmaduros, pero tú tienes veintinueve años." —Por supuesto que no lo estaba.
—Claro que lo estabas.
—No.
—¿No? ¿Entonces por qué estabas enojado y malhumorado?
—Dices todo el tiempo que soy bipolar, tal vez de mal humor.
—Mentiroso.
—Bien, estaba molesto contigo.
—¿Por qué? No te hice nada. —Nu New bufó.
—¿Qué? Haz infringido las reglas.
—No, no lo hice.
—Claro que lo hiciste.
—Dije que no podías tener intimidad con otra persona, pero tú nunca me diste una regla como esa. —Zee resopla.
—Como sea, es un disparate.
—¿Qué?
—Tu excusa del porque estás enojado, enfurruñado y celoso. —El mayor inhala con su pecho resoplando. —¿Por qué te mientes a ti mismo? En serio. ¿Ni siquiera puedes admitir que estás celoso?
—No estoy...
—Te importo. —Nu New interrumpe. —Sé que te gusto y no entiendo porqué continúas haciéndome bailar bailar a tu alrededor de esta manera. Es decir, pasan cosas impredecibles e interesantes, pero en este punto soy más problematico ya que lo valgo, ¿verdad? Entonces, ¿por qué me mantienes cerca? ¿Por qué sigues estando tan lejos de mí? No hay título para esto, demonios. Apenas y me has llamado por mi propio nombre, ¿pero puedes llamarme cariño o bebé?

Zee lo deja gritar, sus ojos siguiéndolo mientras camina de un lado a otro enojado. Nu New lo mira, sacudiendo su cabeza con pequeñas vibraciones. El señor del crimen ajusta su posición, moviéndose para apoyarse en su otro lado mientras tiende su mano para tomar su vaso de whisky.