The Sins Of The Father

CAPÍTULO 23: Primera vez.

El señor del crimen estaba vestido con una de Jeans negros, una camiseta blanca al azar y una chaqueta de cuero gris en menos de un minuto desde que New irrumpiera en el dormitorio y anunciara  lo que Chen había hecho. Era como un toro enojado por la forma en la que salió disparado con New  corriendo detrás de él.

Nu New recuperó los sentidos y se levantó de la cama preocupado por la seguridad de Zee como la de Chen o de cualquier otra persona. Era dolorosamente obvio que enojado-Zee fue levantado, pero seguía siendo atractivo. Era la cabeza, así que no era alguien con el que quisiera ir en contra.

El mayor parecía completamente lívido, su aura oscura e intimidante hacía que los miembros de la familia retrocedieran  aterrorizados mientras marchaba a través de la mansión. Nu New tenía problemas para seguir sus largos y poderosos pasos, pero parecía que New también estaba luchando.

—¿Dónde está él? —Chasqueó. El menor miró al señor que llevaba gafas y que estaba ocupado poniendo sus ojos en la pantalla de su teléfono.
—Max dice que se esconde  en la biblioteca.

Zee giró al instante a la izquierda y se dirigió  a la amplía biblioteca del señorío. Cuando llegaron había miembros de la familia holgazaneando alrededor del señor más alto murmurando entre ellos, probablemente se estaban preguntando de que se trataba toda la conmoción. 

—Chen, sal a fuera, amigo. —Gritó golpeando las puertas de roble. Nu New tragó saliva, ya intranquilo con la situación.
—Muévanse.  —El hombre de cabello oscuro siseó. Al instante se separaron como el mar rojo y Nu New chilló en estado de shock cuando Zee simplemente levantó  su pie y lo estrelló contra la madera. Hubo un fuerte crujido y el esclavo se quedó sin aliento por el miedo.

"Jesucristo, ¿acaba de romper la puerta?"

Nu New quedó boquiabierto cuando los otros señores siguieron al mismísimo señor a la sala. Se sorprendió cuando el señor reapareció con Chen por el cuello, un fuerte y enojado apretón alrededor de su nuca mientras lo sacaba violentamente de la habitación.

—Zee... —Chen chilló. —S-s-suelta mi cuello. Ouch...

El señor del crimen ignoró sus suplicas, curvando el labio en un gruñido salvaje como advertencia. Los miembros de la familia se apartaron rápidamente  de él mientras Zee se movía por el pasillo.

—Divertido, divertido, divertido. —Bas rió, saltando alegremente detrás de los dos. Nu New hizo una mueca, corriendo apresuradamente detrás de los tres. ¿Cuán lejos llevaría Zee esto? Estaba obviamente enfurecido, pero Chen era su primo, su familia. Seguramente no mataría a su propia sangre, ¿o sí?

Sí, si lo haría.

Los ojos de Nu New se abrieron con horror cuando Zee levantó a Chen y lo hizo girar  sobre la barandilla de la escalera, sosteniéndolo sobre la repisa por la parte superior de su camisa, el primo del señor oscuro se aferraba de aferraba desesperadamente  al brazo del mayor.

—¿Qué?  —Gritó mirando aterrorizado el piso. —Zee...
—Tienes algo de coraje. —Gruñó Zee con los ojos completamente negros.

"Que bipolar, ¿cómo? Ahora no, Nu New"

—Me estás lastimando. —Chen hizo una mueca.
—Vas a lastimarte mucho más en diez segundos si decido dejarte caer como si fueras un saco de papas. —Gruñó Zee. —¿Quién te crees que eres arrojando ochenta libras  de producto al fondo del agua? ¿Eres estúpido o creías que porque eres familia no te haría nada?
—Te lo pregunté amablemente. Te pedí que retiraras el producto y no lo hiciste, así que hice lo que tenía que hacer. —Espetó el primo del señor del crimen.
—Oh, Dios mío, Zee. —Nu New gritó. Zee aflojó su agarre y Chen cayó dos pies más abajo hacía el suelo. "Santo cielo, lo va a dejar caer a este ritmo." A su lado, Bas se reía silenciosamente, mirando con diversión mientras que los acontecimientos se desarrollaban  ante sus ojos.
—Divertido, divertido, divertido. —Susurró. Nu New se estremeció centrándose en el señor del crimen.
—New... —Gruñó el mayor. —Sácalo de la  escuela, ahora.
—Sí, señor.
—¿Q-qué? No puedes.
—Oh, ¿no puedo? Que yo sepa, soy el que paga el programa, lo que significa que puedo sacarte cada vez que se me da la gana. El dinero que he gastado en tus clases, podría haberlo utilizado ahora para aumentar la producción. Espero que estés satisfecho contigo mismo.
—B-bien, p-pero déjame subir. —Chen gritó mirando la baldosa que estaba debajo de él, muy lejos. Zee inhaló a través de sus fosas nasales, la ira provocó que ardieran. —¿P-por favor?
—Zee, déjalo subir. —Nu New gritó audazmente, dando un paso igual de audaz. El señor del crimen lo miró con ojos distantes y fríos, pero sin dejar caer a su primo. Eso obviamente era una buena señal para Nu New y la tomaría.
—¿Qué te dije sobre abrir tu maldita boca?  —Le gritó al menor, ganando una mueca de dicho hombre, pero negó con la cabeza y se centró en el cuerpo colgando peligrosamente.
—¿Por favor? —Continuó suplicando, tragando nerviosamente. —É-él aprendió su lección, déjalo subir. Por favor, Zee... Por favor detente.