The Sins Of The Father

CAPÍTULO 16: Me gustas.

Nu New estaba completamente mortificado, tenía que pasar una reunión de dos horas con la mano de Zee firmemente en su trasero. Estaba avergonzado, preguntándose  que pensaría o que diría si alguien mirara la escena del señor del crimen, pero parecía que al mayor eso era lo que menos le importaba porque no le prestó atención  y se centró  en la presentación que se daba.

Nat miró y se dio cuenta, pero no dijo nada al respecto. Sin embargo, el esclavo se mantuvo en silencio. Doojoon le estaba enviando curiosas miradas cada vez que el menor se movía o luchaba  por un gemido, pero parecía que esas miradas  solo hacían que el señor del crimen lo agarra más fuerte, enviando fuertes escalofríos detrás de él.

Los hombres en la mesa de repente se pusieron de pie y la mano de Zee se soltó. El menor permaneció atrapado en su lugar mientras todos salían lentamente de la habitación dejando a los dos solos. Nu New tragó saliva, sintiéndose  muy parecido a un conejo atrapado  en una jaula con un lobo.

—¿A dónde fueron todos?
—Diez minutos de descanso. —Respondió el mayor, devolviendo su mano al trasero del menor.
—¿Por qué estás agarrando mi tr-trasero? —Preguntó Nu New temblando. Zee simplemente canturreó mientras leía unos documentos que estaban sobre la mesa, pero clavó las uñas mñas profundamente en su piel. Un gemido se deslizó por sus labios y se sonrojó.
—Porque puedo. —Fue su simple respuesta.
—No deberías, ¿qué pasa si alguien nos ve? —Chilló tratando de quitar su mano, pero el mayor era fuerte, así que falló.
—Ven lo que quieren ver.

El menor se preguntó si este era distante Zee o bastardo Zee. No era exactamente idiota Zee, pero tampoco ignoraba su presencia, parecía molesto, pero no estaba siendo malo. Esta era otra cara de Zee. Nu New se preguntó como debería nombrar este lado.

—Estás tan... ¡Ah! —Zee le dio un golpe, los temblores hicieron que su cuerpo se sacudiera. —Dios, eres un bicho raro.
—Hmmmm.

El descanso terminó y los demás volvieron a la presentación, Zee se mantuvo firme sobre él, hasta que New caminó detrás de él.

—Ve y ayuda al asistente a buscar algunos documentos. Estás ganando un sustento y no lo haces estando sentado en una reunión. —El señor que llevaba gafas recalcó la última parte a Nu New que este simplemente ignoró, pero al fin se había liberado su trasero.

Siguió a Doojoon fuera de la sala de conferencias y bajó a un gran almacén con por lo menos una docena de estantes  diferentes.

—¿Qué estamos buscando? —Nu New preguntó mirando alrededor dela habitación.
—Uhm, papeles.
—Lo sé, ¿qué tipo de papeles?
—¿Soy un tipo amable?
—No, uhm... ¿qué tipo de papeles?
—Caballo.
—¿Caballo?
—Sí.
—¿Te refieres  a la casa? —Nu New no sabía que tan relevante era un caballo para la compañía  que trabajaba. —¿Cómo un...?
—No, no como un caballo. Uhmm, olvidé la palabra en tailandes.
—Bueno, dame una pista.
—Es un logo.
—¿Logotipo? ¿Tiene un logotipo?
—Sí, uhm... serpiente, león, una cabra con alas.

''¿Qué?''

—Serpiente, león y cabra con alas? —Nu New pensó. —¿Te refieres a una quimera?
—Sí, sí. Logotipo.

Nu New asintió y ayudo a Doojoon a mirar a través de los archivadores en busca  de documentos con logotipo de quimera. Miró a través del primer gabinete y no encontró ninguno, por lo que pasó al siguiente. La cantidad de papeles era ridícula. Había más papel en los archiveros que en una biblioteca.

El estante era demasiado alto  como para que Nu New pudiera verlo por si mismo, por lo que utilizó un taburete cercano para poder alcanzarlo. Miró por encima, miró con cuidado cada carpeta. Cuando no lo encontró cerró la puerta y se dirigió al siguiente, los ojeo y buscó la imagen de la criatura mítica y cuando lo encontró hizo un ruido de triunfo.