Mi preciado secreto (Completo)

Victoria

Después de lo que le hice al artista, me salí del salón todos estaban enfocados a Revés, uno que otro reportero me seguía para hacerme preguntas, obviamente no conteste ninguna. Valentina por suerte me estaba siguiendo, no quería dejarla sola en la fiesta.

En todo el transcurso del viaje, Valentina se limitó en hablarme, el ambiente aún seguía con una vibra pesada.

Cuando llegamos a la casa, todo estaba apagado y en silencio los único que se escuchaba eran nuestros tacones, de repente las luces se prendieron eran beba y Layna, nos estaban esperando.

-Gracias por esperarnos, son cómo unas madres.-Dijo Valentina, me límite en hablar, fui directo a las escaleras. Beba y Layna al verme así no hicieron preguntas, solo nos dieron las buenas noches y se fueron a sus piezas.

Antes de que entrara a mi pieza, Valentina me habló.

-Buenas noches...

Volteo con ella y le pregunto

-¿Si viste cómo me trató?

-Todos lo vieron y al parecer creo que a estás horas ya estás en tendencia en las redes.

-¿Te molestó que haya golpeado a ese tipo?

-No es de todos los días decir que mi hermana golpeó a un súper estrella.- Dijo nerviosa.

-¿Entonces?

-No me gusta que seas violenta pero ese tipo se lo merecía, aparte te viste muy sexy.- Las dos Sonreímos.

-¿Quieres dormir conmigo?- pregunté.

-Obviamente señorita.

Entramos a mi pieza y en cuanto cerré la puerta ella comenzó a besarme, unos segundos después el beso se formó en un beso más pasional, la lleve en la cama sin separarme de ella, le quite el vestido y ella me quitó la prenda, ambas ya nos encontrábamos desnudas. Valentina bajo hacia mis pechos dándome mordidas cortas en mis pezones, me acuesto en la cama, a estás alturas ya estaba mojada; Yo me estremezco al sentir sus dedos dentro de mi vagina, empecé a gemir por los movimientos que hacia... Después de un rato al tener dos orgasmos, mi cuerpo pedía descanso, estaba muy agitada; sin embargo, Valentina me pedía que aguantara para un tercero.

-Aguantaaa, estoy realmente cansada.- Dije, ella me miraba con pucheros.

-Por favooor.-Exageraba los gestos.

Valentina estaba arriba de mi, sosteniéndose con sus dos brazos acorralandome. Yo la abracé cayéndose encima de mí. No me acuerdo que más paso, me ganó el sueño y el cansancio, quedé rendida.