Mi preciado secreto (Completo)

Eres mía

Valentina.

Mi papá permitió irnos al colegio en la combi de Isabel, Jonas no le pareció la idea.

-Papa, no puedo ir al colegio en ese cochino coche.-Dice Jonas suplicando.

-Te van a llevar al colegio, si quieren tener su propio auto con la condición de que también tengan responsabilidades.- Respondió mi papá.

-No tengo la culpa, mis compañeros y amigos no pueden verme llegar con esa carcacha, imagínate se van a reír de mi y capaz de que ya no se junten conmigo, no me hagas sufrir así.

-No, es no, Jonas.- mi papá sube a su auto y deja a Jonas con la palabra.

-Ni modo Papi, súbete que ya es tarde - dijo Isabel en español.

-No me digas así.-Jonas abre la puerta trasera viendo el interior de la combi.-¡Qué asco! Huele a calcetín sucio.-Se tapa la nariz.- Tuviste la oportunidad de comprar un Mercedes, un porsche, un BMW pero nooo la señorita quiso un pedazo de chatarra con sucias manchas dudosas en los asientos, que asco también en el piso, dios mío yo no entro ahí.

-Claro que entras ahí mi rey.-Isabel abraza a Jonas subiéndolo a la combi.

En el transcurso del camino, Jonas estaba tratando de no tocar las manchas y de no caerse al suelo, parecía una báscula de esas antiguas, me pareció gracioso verlo así hasta que empezó a quejarse con su voz chillona, fastidiando, Isabel ya estaba de mal humor por los berrinches que hacía Jonas, de un minuto a otro Isabel no aguanto más, frenó sin previó avisó, por poco me pegaba en la guantera, Jonas calló al suelo y al darse cuenta de que estaba en la mancha del suelo empezó a gritar, se levanta y comienza a sacudirse.

-Hemos llegado a su destino mi jóven Jonas.-Dijo Isabel alegremente.

-Se que lo hiciste a propósito, me las pagarás Alexa.-Dijo Jonas abriendo la puerta, antes de que se bajara del auto saca una libreta para tapar su rostro y evitar que lo descubran bajar de la combi.

-¡¡Cuídate mucho Jonas!!
Gritó Isabel con la intención de que la escucharan.

Las primeras dos horas de clases es de biología; la primera hora estuvimos escribiendo veloz cómo si no hubiera un mañana, la maestra se percató que a todos nos dolía las muñecas de tanto escribir y nos dio un descanso de veinte minutos en la segunda hora.
Abril volvió a sentarse junto a mi, parecía estar distraída.

-Te noto algo tensa, ¿Estás bien?

-Mmm...Tuve una discusión con Samantha.

-Entiendo...¿Se podrán arreglar las cosas verdad?

-No lo sé, es algo fuerte y aparte hoy antes de la noche nos entregarán un reconocimiento al equipo y las porristas, sinceramente no tengo ganas de ir y no quiero verla, me siento mal.

Asiento con la cabeza antes de decir algo la maestra me interrumpe avisando que continuará la clase con una explicación, después de acabar la clase de biología, salimos a los pasillos para entrar al salón de física, esta vez no me acompañaba Abril y mucho menos Isabel, después de una hora el timbre suena indicando la hora del descanso.

Estaba en la cafetería comiendo un pedazo de pollo con arroz, le mandé un mensaje a Isabel para saber dónde estaba, esperé diez minutos y no me respondía, le mandé otro mensaje indicándole que estaba en la cafetería, pasaron diez minutos desde que le mandé el segundo mensaje, ya había acabado mi desayuno; estaba apunto de ponerme de pie hasta que alguien atrás de mí me pica las costillas, comienzo a retorcerme de risa.

-¿¡Que crees!?-preguntó Isabel picándome a la vez.

-¿Qué pasó? Para por favor.- Dije entre risas.

-¡Hoy me van a dar un reconocimiento!

-Wooow Felicidades mi amor.- Nos abrazamos.-¿Y eso por qué?

-Porque gané al mejor poema, no sé si te diste cuenta que estuve en el club de literatura al inicio de clases cuando me juntaba mucho con Toshio.

-Es cierto, perdón no sabía, es que en esos días me caías muy mal porque te juntabas mucho con él y pensaba que te gustaba.

Isabel ríe.

-Que ocurrencias Valentina.

-Eso ya no importa, ahora eres mía.

-Solo tuya.

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Muchas gracias por leer.