Capítulo 28: Prueba de fuego.

6K 442 36
                                    


Narrador omnisciente.

Parecía increíble todo lo que pasaba al mismo tiempo en diferentes lugares; en el hospital el alfa se ahogaba en su propio enojo y luchaba con sus ganas de ir él mismo a matar a la bruja de Simone, lo que implicaba dejar sola a su esposa; en el pueblo nadie tenía idea de nada, por lo tanto cada quien hacía su día de forma usual y en completa armonía; cerca del muro las tropas guiadas por Adrana esperan la señal por parte de la antigua Luna del alfa, la cual no dudo a la hora de traicionar toda su especie con el corazón lleno de odio y envidia.

Los vampiros habían estado reuniendo fuerzas desde la masacre que Luz había cometido, no eran muchos pero, su nueva reina confiaba en que tomarlos por sorpresa les daría ventaja.

Adrana tenía un solo objetivo y era matar a la castaña, por eso había elegido cuidadosamente un grupo de tres vampiros que fueran a buscarla mientras la batalla se desataba, conociendo al alfa se uniría a luchar con su pueblo y no dejaría arriesgar la vida de su amada; Simone ya le había dado las coordenadas de la chica y ya sabía que si de verdad estaba dormida no podría luchar y defenderse.

Como si una voz interior le hablara, Aidan tomó la decisión de enviar un escuadrón a buscar a su ex esposa.

Mientras, en el área de cuidados intensivos Deylin intentaba hablar con Luz que respondía con monosílabos.

—Es increíble pero, tu bebé está en perfecto estado y es posible que venga en cualquier momento —comentó la galena en un intento de animar a su amiga, luego de un par de minutos era evidente que no respondería — Aidan dijo que yo guiaría el parto ¿Tú también quieres que sea así?

Lo que preguntaba era una tontería, pero lo único que quería era que Luz volviera a la vida, que volviera a ser ella.

—Sí.

—Bien ¿Ya elegiste un nombre? —Deylin toma asiento a su lado y toca su cabello sintiendo los nudos que le restan suavidad —Ya sé que será una mini tú.

En el fondo Luz estaba triste pero, no quería estar sola; su amiga estaba haciendo justo lo que ella necesitaba, que alguien le hablara para no dejarla pensar y revivir el momento en el que la destruyeron... Por segunda vez había sido derribada.

Ahora en ella solo quedaba un inmenso temor a ser feliz, porque cada vez que sentía que todo marchaba bien algo se interponía; Luz no quería hablar de cómo se sentía, no quería miradas de lástima, no quería consejos o la típica frase de que todo iba a estar bien, Luz no quería ser víctima.

Pronto el ataque en el pueblo empezó, los lobos no tardaron en transformarse y empezar a pelear; a diferencia de los lobos, los vampiros tenían una educación decadente y ninguno se educaba a menos, que perteneciera a las filas de la guardia real.

Los lobos fueron rápidos para resguardar a los niños y mujeres en cinta, la noticia del ataque viajó a tres lugares; la casa del alfa, el consejo y la academia.

Evidentemente la falta de preparación les pasó factura ya que no habían mecanismos de defensa guiados por alguien, cada quien peleaba por su cuenta y como pudiera. Mucha sangre se derramó de ambas especies.

Aidan.

Las luchas siempre me han parecido emocionantes, lo que no es de mi agrado son las muertes que siempre ocasionan.

No hay soldados en la academia, la gran mayoría son estudiantes y elijo a los de último año para llevarlos conmigo tan rápido como puedo, confío en que no dejaré a esas bestias llegar tan lejos, por eso tengo que tomarme el riesgo de dejar a mi Luna sin protección.

Entre las garras del alfa©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora