‼𝙩𝙤𝙠𝙮𝙤 𝙧𝙚𝙫𝙚𝙣𝙜𝙚𝙧𝙨 𝙮𝙖𝙣𝙙𝙚𝙧𝙚‼
______ Kinomoto regresa a Japón luego de muchos años solo para reencontrarse con su viejo mejor amigo, Hanagaki Takemichi. Ambos se llevarían muchas sorpresas del otro. ______ se preguntaba cómo su mejo...
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Draken sonrió enormemente al verla entrar, le gustaba pensar que de ese momento en adelante, tendrían una rutina —por lo menos entre semana— juntos. Soltó una risita y acarició con suavidad la cabellera castaña de la niña que entre saltos había llegado a aferrarse a su pierna. Con una sonrisa casi imperceptible ______ se acercó a su amigo —que ahora también sería su jefe—para hacer una reverencia que puso algo nervioso al chico.
—No hacen falta las formalidades, pequeña —sonrió de lado.
—Sé que me ofreciste el trabajo por ser tu amiga. Pero... —titubeó—. Te lo agradezco mucho. Te prometo que daré mi mejor —se enderezó para darle una sonrisa mas grande.
—Lo sé —acarició su cabellera ____ también, alentándola. Sus lindos orbes ____ se clavaron en él.
—¿Por dónde quieres que empiece? —alzó sus cejas curiosa.
—Por ponerte ropa adecuada —rió levemente—. En la parte de atrás hay un par de juguetes por si te aburres, Sakura-chan —se agachó a su altura.
—Traje unos cuantos de casa, pero gracias, Draken-kun —le sonrió cerrando los ojos—. ¿Está bien si juego en la parte de atrás entonces? —Nii-san dijo que evitará causarle molestia o estorbarle a Draken-kun.
—Si así lo quieres —sonrió—. En cuanto tu hermana se cambie le enseñaré unas cuantas cosa sobre las motos, no es peligroso para ti, así que si gustas puedes mirar, será divertido —ella asintió.
Luego de rebuscar en el mostrador, Draken se lo entregó a la chica, indicándole donde cambiarse. Sakura preguntó con ilusión que es lo que ______ aprendería a hacer, él le explico con palabras torpes —nada técnico para que pudiera entender— en que consistía el mantenimiento de una motocicleta, asegurándole que era la razón mas frecuente de la visita de los clientes. Momentos después, la chica salió vestida con un uniforme idéntico al de él. Sonrió levemente, intentando hacer menos notorio su sonrojo.
