winnie

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— ¡Ni siquiera sé como rayos entro a mi casa Jisung!

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— ¡Ni siquiera sé como rayos entro a mi casa Jisung!

— Seguro que soborno al conserje, Emily es una arpía con dinero para tirar al techo, no me sorprendería —dijo el rubio que jugaba con la bebé en el sofá junto unos bloquecitos de peluche— hey, pero animate, tienes compañía y es igualita a ti, ¿verdad pequeña winnie pooh?

La menor rió por las cosquillas que le hacía jisung.

— Quisiera alegrarme Sung, pero tengo a una bebé de dos años en casa a la que no puedo descuidar y tres ensayos que no he ni empezado —suspiro con frustración tirándose al sofá individual— sus cosas están aquí digo el corral, el cochecito, su bañera y todo lo que sus "abuelos" le compraron posiblemente pero n-

— ¿Cómo es que sigues poniendo peros Lee Felix? tienes una hermana seis años menor que tú, sabes cómo cuidar a una bebé —bramó Jisung observando a su mejor amigo rascando su nariz.

Cosa que hacia cuando estaba ansioso.

— Lo sé.. lo que no sé es cómo tratarla ¿entiendes? sé bañarla cambiarla, entretenerla y eso ¿pero y si enferma? mamá se encargaba de eso no yo —respondió suspirando— y a penas puedo mantenerme vivo en este departamento Sung, cuando tenga que ir de nuevo a la universidad ¿quién va a cuidarla?

— En ese punto tienes razón, te ayudaría pero ya tengo mucho trabajo últimamente —hizo una mueca al escuchar el pequeño estornudo de Winnie— ser enfermero pasante ya no es tan divertido como creí.

— Ya lo creó.

Ambos rieron. Pasaron el resto de la tarde viendo series, claro después de darle de comer a la bebé, bañarla y dormirla en la cama de Felix rodeada de almohadas y peluches para que no se lastimara.

Cuando llegó la hora de irse la pequeña Winnie había despertado, para despedirse de Jisung según él.

— Vendré cuando pueda Felixie, lo prometo —le dio un corto abrazo y revolvió su cabello haciéndolo reír. El castaño era como un hermanito menor para él, ahora tenía una sobrina muy linda— y Winnie la próxima vez que venga te traeré un peluche, ¿de qué lo quieres?

Sin entenderlo mucho la bebé rió tocando su pancita, su pijamita era de winnie pooh.

— Ya veo, de tu gemelo Pooh, de eso será entonces —besó la mejilla regordeta de Winnie y se despidió con la mano para irse por las escaleras.

— Volvimos a ser tú y yo preciosa —le habló a la bebé.

Ella hizo balbuceos en respuesta, ruiditos de bebé como decía él.

— De verdad te pareces a mí —rió. Antes de entrar vio a alguien entrar en el departamento vecino, pero no pudo descifrar bien quien era— oh, tenemos un nuevo vecino.

Winnie aplaudió riendo.

— Mañana le damos un bienvenida, claro si no es cómo la señora Smith que me cerro la puerta en la cara. Vieja desalmada.

hey chris! hey felix! ๑ chanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora