daddy

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Felix era un vampiro, de alto rango, con dinero, una mansión a la que llamaba "casita", tenía un gato y un hurón, aunque estos eran cambia formas así que tienen nombre, Minho es el gato, y Hyunjin el hurón, y aparte de ellos, no vivía con nadie más.

Hasta que los vio, a un alfa y su pequeña cría en la calle comiendo aunque claramente era la niña la única que estaba comiendo ya que su padre solo la estaba contemplando tratando de no caerse dormido. Pero un yogurt con cereales pequeño, no es exactamente comida. Y a pesar de que él no era conocido por ser amable y humilde, ver esa imagen le dió una sensación muy, realmente muy triste en su corazón, tenía que ayudarlos.

Por eso, les ofreció quedarse en su casita, de todas maneras alguien más o alguien menos en su hogar no hacía la gran diferencia.

O eso se dijo cuando iban camino a ella.

— ¡Señor Fefi su casita es enorme! —la pequeña de nombre Chaeryeong corrió hacia dentro de la mansión a penas el rubio había abierto la puerta.

— Chaer no debes entrar así en casas ajenas ¿recuerdas? —su padre la regañó con cariño para ir hasta ella y cargarla. Se volteo a ver al hombre que tan amable les había dado un techo por un tiempo— de verdad muchas gracias, no sabe cuánto estoy agradecido por su ayuda.

— Eres mayor que yo, no me trates de usted es muy extraño —dijo en broma, no tanto ya que en realidad, el alfa sí era mayor que él— no hay de qué, siempre que pueda ayudar a alguien lo haré.

— ¡Papi mira un hurón! ¡bájame bájame! —el mayor bajo a la niña que inmediatamente se agachó a tomar cuidadosamente al pequeño hurón blanco que llevaba un gorrito— que bonito eres ¿cómo se llama señor Fefi?

— Hyunjin.

El hurón se transformó en una persona cuando la niña lo dejo en el suelo nuevamente, asustada se cayó pero el mismo Hyunjin la cargo.

— Tu también eres muy bonita —le sonrió a la menor aún sorprendida.

El alfa rió al ver a su hija tan sorprendida de aquél chico.

— ¡Señor Fefi su casita es la mejor! papi yo también quiero un hurón humano.

— No, te aseguro que no lo quieres, son muy dramáticos.

— A veces me caes mal Felix —murmuró Hyunjin— y ¿quiénes son nuestros invitados? está pequeña es adorable.

— Ella es Chaeryeong y su padre Chan —le pregunto al alfa.

— Bang Chan, es un gusto conocerte Hyunjin —sonrió hacia el chico.

— También es un gusto conocer-te, Hyunie —la pequeña imitó el gesto de su papá.

— ¡Eres tan adorable! ¿no quieres compartir cuarto conmigo? tengo una cama desplegable y podemos ver películas y hacerte muchos peinados bonitos —habló el hurón mientras caminaba con la niña en brazos, yendo a quién sabe dónde— ¿te gusta Barbie?

— ¿Qué es Barbie?

Dejaron de oírlos claramente cuando ya estaban algo lejos, Felix pensó que tal vez Hyunjin la estaba llevando a su cuarto a jugar, desgraciadamente ese tonto hurón tenía más juguetes de lo que un niño de seis años podrían tener.

— ¿Quieres comer algo? —le preguntó al mayor que inmediatamente lo miró, quizá eso era un sí mudo— creó que todo lo que conseguías de comer se lo dabas a Chaer ¿o no?

— Sí.. Quién diría que por primera vez en la vida se cambiaron los papeles —Felix lo miró confundido y con curiosidad. Chan rió— se ve con mucha frecuencia a omegas con crías vagando por la calle ¿sabes? porque se les dificulta conseguir trabajo o porque su alfa los abandonó, a mí me sucedió prácticamente lo mismo.

hey chris! hey felix! ๑ chanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora