CASUALIDAD PROHIBIDA

CAPÍTULO 52

"FUEGO"
(Último capítulo)

—Yona...Dios mío... ¿que te hice?—sollozo—Lo siento mucho... lo siento mucho—repito por décima vez mientras me acerco al borde de la ca hecha de cosas naturales.

Las lagrimas en mis ojos no paran de salir y la vista se me nubla, la culpabilidad me ahoga y no puedo parar de echármela y de pedir disculpas.

—Da igual, lobita, no pasa nada... estoy mejorando, estoy poniéndome bien, no fue tu culpa.—intenta coger mi mano pero al intentar acercarse le sale un gemido y mueca de dolor.

Se me rompe el corazón verlo así...

—Lo siento tanto...—me acerco a él y me arrodillo en el suelo para quedar a su altura en la cama, hundo mi cara en la cama y él acaricia mi cabello mientras lloro.

—No sabias lo que hacías, no es tu culpa.—

—¿Saldrás de esta, Yoni?—Le preguntó levantando la cabeza y obligando a calmar mis lagrimas.

—Saldré de esta, Kia.— le sostengo la mirada y sabe perfectamente el por que.

—No me llamabas así desde... ¿primaria?—le digo y él sonríe de lado.

—Y tú no me volviste a llamar como lo hacías...—dice y entrelazo nuestras manos.—Lo extraño ¿sabes? Nunca lo admitiríamos en voz alta, pero ambos sabemos que lo hacemos.—

—Te quiero, Yi, no te desharás tan fácilmente de mi, así que te prohíbo morirte.—le digo y sonríe con ese brillo que adoro en sus ojos al escuchar su apodo.

—No lo haré, Kia ki.—levanta el brazo para dejar un mechón de pelo tras mi oreja, disfruto su tacto como una onda de calor que me recuerda la felicidad de la infancia junto a él.

—Teníamos unos apodos de mierda ¿lo sabías?—nos reímos un poco.

—Era lo mejor que teníamos ¿vale? Así que cállate.—dice haciendo que riamos más pero empieza a quejarse—Mierda, espero que solo dure pocos días mi curación—

Mi culpa.
Está así por mi culpa.
Yo le hice esto.
Yo daño todo lo que toco.
Hiero a cada persona que se me acerca.
Soy destrucción, soy un desastre.
Yo lo lastime.
Si fui capaz de lastimarlo ¿que me podría detener?
¿Que soy capaz de hacer sin ser consciente?
¿Que cojones soy? Y ¿por que no logro funcionar mis dos partes en vez de que estén separadas?

Veo la cara de arrepentimiento de Yona por el comentario, me conoce tan bien que sabe lo que pienso, o al menos una parte de ello.

Me separo de él de golpe, retrocediendo y chocando con la ventana, él intenta incorporarse pero le es imposible, lo que me destruye el corazón.

Mi corazón late y siento la energía emanar de mi, así sintiendo una gran ola de calor y él aura empezando a cubrirme.

Lex intenta acercarse, olvide por completo que se había quedado en el marco de la puerta, pero yo solo intento pegarme más a la pared, él lo entiende y se queda donde está.

Solo me puedo centrar en la camisa que oculta su cicatriz, y detesto la necesidad de huir lejos, algo que yo jamas haría, yo nunca huyo, jamás.

—Lo siento.—me disculpo con Yoni que intenta decir algo pero antes de que abra la boca lo interrumpo—Necesito salir...—sin esperar respuesta esquivo a Lex que intenta cogerme de la mano para acompañarme.

Capta la indirecta y se queda con Yoni, siento como él aura se vuelve más viscosa a mi alrededor y como me cubre.

Salgo a toda prisa por la puerta de atrás para que nadie me pueda ver, cuando el aire fresco choca en mi rostro y yo me pierdo en el frondoso bosque.