Estamos aguardando afuera, listos para atacar. Mi equipo espera a mis espaldas la señal, atentos.
Giro mi cabeza para observarlos.
- ¿Alguna duda? - pregunto. Ninguno responde. - Bien. Si surge alguna durante el ataque, háganse a un lado y no molesten a los que si hacen su trabajo. - hago una pausa. - Y procuren terminar la noche con vida. - agrego con voz firme. - Que no tengo tiempo, ni paciencia, para buscarles reemplazo.
- Oh vaya, que conmovedor. - menciona Milo divertido.
- Si que sabes levantar la moral del equipo. - sigue Dexter con esa sonrisa presumida y de galán que acostumbra a tener en su rostro.
- La última vez casi les explota una granada en la mano, porque jugaban a tirársela al otro. - acota Stellan con ese tono de voz analítico tan característico suyo. - Yo creo que lo hice con fundamento.
- Ya sabes el dicho, "El que tenga miedo de morir, que no nazca". - continúa el pelinegro.
Pongo los ojos en blanco y regreso la vista al frente, observando todo el panorama, mientras ellos continúan con su debate, hablando todos a la vez.
Chasqueo los dedos para llamar su atención. - Concéntrense mi ejército de conejillos de indias.
- Y luego se queja cuando lo llamamos "cascarrabias". - habla Larissa entre dientes.
- Oí eso. - sentencio. - Así que hoy nos saltaremos el sorteo, y serás tú quién se va a quedar supervisando la limpiada luego del desastre que vamos a dejar aquí.
- ¡Ey! - se queja frunciendo el ceño.
- Tú sigue quejándote, y lo harás también al siguiente ataque, y al que le sigue a ese.
- Anda Lari, no te quedes callada. - la anima Milo. - Estamos en una democracia. Tienes voz y voto.
- Cierra el hocico. - habla irritada.
- En posiciones. - ordeno al percatarme del movimiento que hay dentro de la mansión.
Vuelvo a observarlos. Sus semblantes de ponen firmes y serios, y toman bien sus armas. Veo la determinación en sus ojos, y la seguridad en su postura.
Mi equipo es el mejor. Si, pueden ser unos niños inmaduros que pelean por quien va la ventanilla de la camioneta, pero cuando estamos a punto de iniciar un ataque todo eso queda atrás y sacan esa parte feroz y llena de adrenalina que los hace ser los mejores.
Cuando quede solo, luego de que tres de mis hermanos se fueran a otro país, y otro de ellos se convirtiera en un muerto viviente, me sentí muy perdido y sin rumbo, nunca en mi vida había estado sin su presencia en mi vida.
Hasta que llegaron cada uno ellos, y de alguna forma se sintió como un rompecabezas, dónde cada pieza va encajando en su lugar.
- Andando. - ordeno. - Acaben con todo.
Y dicho esto, marchan hacia allí, siguiendo sus posiciones y con sus armas apuntando.
- Que empiece la diversión. - anuncio, y voy junto a ellos.
Siempre es una noche divertida cuando tenemos planeado algún ataque. Nos gusta la acción y esa adrenalina que nos recorre, las cuál consigue que nos sintamos invencibles.
Suele ser algo sencillo para nosotros, y todo gracias a la buena coordinación que hemos adquirido con estos años. Cada uno de los miembros de mi equipo tiene un papel especifico, y deben cumplirlo. Solo hay una regla que pongo... No salirse del plan trazado. Sin importar nada.
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Estoy Pensando en Ti (Mafia Marshall VI)
Roman d'amourAstor es el menor de los hermanos del clan Marshall. Desconfiado, escéptico, arrisco y malhumorado. Jun es el menor de los hermanos del clan Hyun. Amable, simpático, bondadoso y alegre. Dos polos opuestos. Blanco y negro. Yin y Yan. Positivo y ne...