Estoy Pensando en Ti (Mafia Marshall VI)

Capítulo 26

Rain🧡

Salí de mi habitación y me asome por la escalera para salir al rescate de Leo si Astor se pasaba de rosca. Lo que sabía que haría.

Sin embargo no pude salir al rescate de mi amigo porque quede completamente paralizado cuando lo escuche decir esas cosas.

¿Qué si escuche eso que dijo sobre mí? Pues claro que sí. Y sentí mariposas al oírlo decir que yo era un miembro importante de su familia.

Familia. Su familia.

Y que me protegería. ¡A mí!

Tuve que contenerme para no saltar a sus brazos y abrazarlo sin soltarlo, sin importar sus amenazas. Porque la verdad es que a mí no me dan miedo, solo le doy el placer de creer que sí. Ya una vez lo dije...

A mí no me asustas, Astor Marshall.

Cuando vi que Leo se marchó, y Astor fue directo a la morada, bajé corriendo y salí por la puerta de la entrada.

- ¡Leo! - le chisto a este antes de que se suba a su auto.

Este se gira con una expresión temerosa, pero al percatarse de que soy yo veo el alivio en sus ojos.

- Ven, tenemos que hablar. - lo llamo.

- En los líos que yo mismo me meto... - se queja en voz baja caminando hacia mí.

Conocer a Leo ha sido una de las mejores cosas que me han pasado desde que estoy aquí, pese a que lo haya conocido en una de las peores noches que he tenido desde que estoy aquí...

*****

Regreso a la fiesta caminando con pasos firmes, tan cabreado que podría destrozar todo a mi alrededor, y no me importaría en lo más mínimo.

Y me odio por pensar así. Y a él más por ponerme en esta situación.

Vuelvo a quedar junto al amigo de Axel. Nos presentó apenas llegamos, y ambos congeniamos bastante bien. Aunque no en el sentido que yo esperaba. Y creo que él también lo noto. Aun así no me molesta, Leo me agrada.

- Lo siento por todo ese numerito. - me disculpo apenado, y a la vez muy enojado.

No puedo creer que Astor se haya comportado de ese modo. Ni que se haya aparecido por acá.

¿Qué pretendía?

Soporte por años el hostigamiento, y que me trataran como si fuera una porquería, para que él venga hasta aquí a comportarse de esa manera, como un maldito salvaje, reclamando algún derecho sobre mí. Luego de que en más de una ocasión dejara bien claro que yo le importo una mierda.

Es tal la impotencia que tengo, que siento una profunda gana de llorar, y mis ojos arden por el esfuerzo de reprimir las lágrimas. Se me formo una enorme angustia en el centro del pecho.

¿Por qué tengo que ponerme así por un cascarrabias como él? A mí también debería importarme él una mierda.

Pero no es así...

- ¿Es tú ex? - pregunta Leo, sacándome de mis pensamientos.

Esa pregunta me toma muy por sorpresa. Implicaría que él y yo hayamos tenido una relación. Y sé que no podríamos estar más alejados de eso. No me tolera.

- ¿Qué? No. - respondo, todavía bastante molesto. - Es... algo así como mi tutor...

Me mira alzando una ceja. - ¿Ah si? - inquiere extrañado.