❝𝐂𝐔𝐏𝐈𝐃𝐎❞ [𝐽𝑖𝑛𝑆𝑜𝑛]

32. Jabalí del Tartaro

Un rostro de un ángel, siempre "tan positiva" y con un aura que transmite confianza. La mayoría de los alumnos terminan fechados por ella, su belleza era tan única que los mismos chicos la consideran como señorita Corea. ¿Quién no se sentiría atraído por la profesora y psicóloga Jieun?. Cada vez que avanzaba dejaba salir un aroma a rosas y peonía, que dejaban completamente encantado a cualquier que pasara por su lado.

— Buenos días, profesora Jieun— saludó una de sus alumnas.

— Buenos días, señorita Bae— contestó con una voz suave adornando en su rostro una pequeña sonrisa.

Siguió avanzando hasta detenerse en una esquina. A lo lejos, se encontraba el estudiante a quien más deseaba ver hoy, caminando junto a otro chico más, y quién seguramente será un dolor de cabeza ahora que se ha dado cuenta que ambos jóvenes están muy cerca últimamente.

— Es mejor matarlo cuanto antes— susurró una voz masculina—. Gea está en la espera de la señal.

La mujer apretó ligeramente la manzana dorada que llevaba en su mano derecha.

— Primero, nos vamos a deshacer de su acompañante— respondió ella volviendo a retomar el camino en cuanto los chicos entraron a su clase—. Tengo dos conejillos de indias...me falta una.

— La tengo— dijo él chico haciendo que la profesora se detuviera.

— ¿La chica Channel?— preguntó alzando una ceja.

Jennie se acercaba cada vez más hacía dónde ellos estaban, y en cuanto notó la presencia de la profesora sonrió ligeramente en forma de saludo.

— Buenos días, profesora Jieun— hizo una pequeña reverencia y su sonrisa se ensanchó más al mirar al chico—. ¡Mark!, me alegra que hayas venido hoy. Jackson y Jinyoung te esperan en clase.

— Ya estaba en camino— contestó sonriendo—. Nos vemos después profesora, que tenga suerte en el trabajo de hoy.

Miró por última vez a su amiga y comenzó su camino hacía su primera clase. Jennie estaba por retomar su camino hacía el sanitario cuando la profesora la tomó del brazo.

— ¿Podrías darme un minuto, señorita Kim?.

La chica asintió.

— Vamos a mi oficina.

Ambas chicas se alejaron de ahí. Por otro lado, Mark llegó a su primera clase y se acerco hacía su asiento.

— ¿Mark?— Jinyoung se colocó de pie y fué directo hacía dónde se encontraba el americano—. ¿Dónde haz estado?, no haz respondido ninguna llamada. ¿Está todo bien?.

Jinyoung colocó sus manos en los hombros de su amigo. En el fondo, se sentía culpable de haber dejado de lado a Mark porque también es uno de los afectados, no quería hacerlo menos, pero la situación de Jackson es un poco más complicada. Ambos chicos lo han estado buscando pero parecería que se lo había tragado la tierra, después de haberle asignado a Bambam buscar a Mark...no ha ido a trabajar junto aquel productor, tal parece que ha renunciado a su sueño de ser productor; algo que no es para normal en Mark porque los que conocen al chico saben que ese es su sueño. Entonces, ¿dónde ha estado durante estos días?.

— Necesitaba estar solo, y regresé a los Ángeles...a buscar respuestas sobre quien soy.

Jackson había alcanzado a escuchar la conversación, y le pareció extraño que su amigo se haya regresado a su país natal sin siquiera invitarlo como suele hacerlo siempre antes de marcharse con su familia, además, su madre le habría llamado preguntando porque no había acompañado a su hijo. ¿Será qué al fin había terminado cualquier lazo de amistad con Mark qué ahora ni siquiera quería que conviviera con su familia?.