❝𝐂𝐔𝐏𝐈𝐃𝐎❞ [𝐽𝑖𝑛𝑆𝑜𝑛]

33. Espada

Había logrado colocarse de pie, estando aturdido por el golpe pero dispuesto ayudar de alguna manera a su amigo. Todo sucedió rápido que en cuanto miró a Jinyoung sobre el suelo sin mostrar algún movimiento su mente sobre pensó demasiadas cosas haciendo que el enfado de Jackson llegara a su límite. Ahora lo deseaba con toda sus fuerzas matarlo, el cielo se había teñido oscuro y los rayos al igual que los truenos se hicieron presentes.

— ¡Hey, maldita bestia asquerosa!.

Llamó la atención del jabalí, y éste se colocó en posición de ataque rascando con sus pezuñas la tierra. Ambos se miraron de manera retadora que en cuanto el jabalí corrió hacía él logró lanzar rayos que hacía que el jabalí se desviara un poco pero ninguno logro herirlo. Frustrado y enfadado también corrió hacía el monstruo. No sabe cómo exactamente, solo lo imaginó y gracias a eso, en su mano derecha sostenía una gran espada la cual alzó hacía el cielo haciendo que los rayos se concentraran en esta. Estando a pocos metros, y con el corazón agitado logró esquivar los movimientos del jabalí para después ensartar la espada en el pecho del animal el cual ahora agonizaba de dolor.

— Regresa de dónde veniste.

Clavó más profundo y otro alarido salió del jabalí, cuando creyó que era suficiente sacó la espada y el animal cayó al suelo. Pensó que todo había terminado pero se sobresalto al ver cómo un estruendoso rayo terminó por dejar en cenizas al jabalí. Él jura que no lo hizo, ni siquiera sabía que podía hacer eso y en cuanto alzó la mirada vió como tres chicos bajaban lentamente hacia la tierra.

— Nada mal para un novato— dijo uno de ellos—. ¿No es así, Zeus?.

Zeus no respondió, mantenía la mirada fija en Jackson quien también lo hacía. Eran demasiadas coincidencias, y no cabía duda que además de ser él quien tiene el rayo era tan parecido a ella...a su primer amor. ¿Cómo puede ser posible que no lo haya reconocido antes?, sintió culpa y vergüenza de recordar las veces que Rea le pedía que fuese a verlo pero él simplemente no quería hacerlo porque solo crecería la espina en su corazón. Necesitaba una explicación, ¿por qué ellos lo ocultaron?, ¿por qué jamás volvieron a mencionarlo?, ¿todo fué parte de un plan para que al final fuese él quien escondiera el rayo?. Está totalmente seguro que ni siquiera sabía que tenía un verdadero padre o más bien, sobre dónde viene en realidad porque podía ver en sus ojos el temor con cada paso que Zeus daba pero la expresión en su rostro era de total seriedad. Su corazón comenzó agitarse, sintiendo una repentina emoción; habían pasado casi cuatro mil años y su primer hijo se había convertido en todo un hombre, muy atractivo y con el cuerpo de un dios. Aunque no haya crecido con él también se consideraba un Olímpico. Por otro lado, Jackson en ningún momento despegó la mirada del que se supone es su "verdadero padre"; tenía tanto que decir pero no sabía por dónde empezar exactamente, y esto se volvía cada vez más incómodo. Ya no podía dudar o negar lo que estaba sucediendo, no cabía duda que él es hijo de Zeus el rey de los dioses pero eso no era importante para Jackson, solo quería que sus preguntas fueran respondidas pero tendrá que esperar un poco más porque ahora no es el momento. Se giró en cuanto escuchó toser a alguien y al ver que se trataba de Jinyoung corrió hacía él colocandose de rodillas ya que el chico seguía en el suelo.

— ¡Jinyoung!.

— E-estoy bien...

El cuerpo le dolía, y con dificultad se sentó. Sus ojos se agrandaron al ver que su amigo sostenía una espada, una débil sonrisa se asomó en sus labios.

— Hey...lo hiciste— señaló con la mirada la espada—. ¿Una espada?, e-eso es...

— Hablaremos de eso después, necesito llevarte a un hospital— con cuidado colocó su brazo en la espalda de su amigo para poder alzarlo y su otra mano en las piernas del chico de manera que ahora lo estaba cargando.