Un trocito más (adelanto)

797 176 7
                                    

No dejó de darle vueltas a sus palabras. Incluso, tras volver a su cuarto y prepararse para la cena de esa noche. No iba a haber nada nuevo de la noche anterior a esta. Sin embargo, el encuentro que había tenido con Werrington, hacía unas horas, la había dejado tocada.

Aunque no quiso darle más importancia de lo que era; pensándolo bien, y si era lo suficiente valiente para reconocerlo, no pensaba mal de él. Bien cierto era que la joven inocente e ingenua, que fue, estaba resquemeda por un sueño frustrado. Por él mismo, que lo rompió sin remordimiento alguno. Porque se imaginó al príncipe perfecto, que no lo era. Era un hombre con sus defectos y... Deseos.

¿Qué había de malo si había cambiado después de todo?

- Está perfecto así - le dijo a su doncella una vez que le había ayudado a elaborar un peinado sencillo pero elegante - Gracias. No me espere cuando regrese de la velada. Puede ir a descansar.

¿Sería verdad que habría estado dispuesto a luchar por ella, si hubiera mostrado un poco más de interés? ¿O si por el contrario, era una farsa de cara a la galería?

Había una manera de saberlo, era hacer un movimiento en el tablero de ajedrez. Un movimiento coherente o impulsivo. Todo o nada. Lo que no podía ser era quedarse parada sin hacer nada.

¿Qué más podría perder si ya en el pasado perdió el orgullo y el corazón? No pasaba nada, si ya lo había sufrido una vez tontamente.

Se colocó el chal y se preparó para esa noche que podía ser igual de monótona que la anterior o no, si cambiaba algo de su parte, que finalmente le diera la respuesta a lo que estaba buscando.

Vería si era verdad o una mentira por la que había que apostar a ciegas.

Siénteme (breve)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora